El terrorista de Christchurch, Carl Schmitt y el melting pot

¿En qué se parecen el terrorista de Christchurch[1] y Carl Schmitt? En que ambos hablan del melting pot, de lo que en castellano llamamos crisol de culturas. Y ninguno de los dos lo hacen en buenos términos…

Para el primero, el objetivo fundamental es la separación racial y poner fin definitivo al “crisol de razas”. Su finalidad es que una supuesta “raza blanca” se separe absolutamente de las demás y logre la supremacía sobre las otras supuestas “razas”. Incluyendo la “raza” de los latinos, por si hay algún lector latino que se considere miembro de la “raza blanca”[2]. El asesino de Christchurch dice que hay que “eliminar físicamente” a los “invasores”. Es el lenguaje de los nazis que revive impulsado por la ideología de la White Supremacy.

En su “Manifiesto”[3] -que yo llamaría más propiamente un panfleto- describe la masacre de la ciudad neozelandesa de Christchurch- no como “un ataque a la diversidad, sino como un ataque en nombre de la diversidad”. Asesinar personas que viven fuera de su territorio es participar en el combate en que están empeñados los extremistas partidarios del etnopluralismo, en ese verdadero apartheid a nivel mundial[4] que se ha puesto de moda en sectores de extrema derecha e incluso entre ultra conservadores del llamado primer mundo.

Sí, el terrorista australiano[5] es un partidario del etnopluralismo (él dice que es un etnonacionalista, a confesión de parte relevo de prueba), ideología que pertenece al núcleo de la llamada nueva derecha, especialmente al movimiento identitario. Se puede decir que el etnopluralismo es el antónimo, es exactamente lo contrario al crisol de nacionalidades o melting pot.

Según el etnopluralismo, cada “pueblo” tiene derecho a vivir libre de influencia extranjera[6], influencia que se considera como una amenaza para la propia identidad cultural[7]. La gente que siente de esta manera, debe estar muy insegura de su propia identidad. En consecuencia, cada “pueblo” debería residir en un determinado territorio y no salir de él -salvo para hacer turismo- ni menos mezclarse con otros pueblos. Los matrimonios interculturales estarían prohibidos. Como señalé recién, sería un verdadero apartheid a nivel planetario.

El terrorista sostiene que hay que “garantizar que los diversos pueblos sigan siendo diversos, separados, únicos, sin diluir, sin restricciones de expresión y autonomía cultural o étnica”. Más etnopluralismo, imposible. La esencia del etnopluralismo es la creencia en que “cada pueblo tiene el derecho a mantener su sociedad libre de influencias externas”[8] [9]. Los pueblos tienen que estar solos, separados de los demás, sin “mezcla” de ningún tipo. El etnopluralismo es “un racismo sin razas, ya que en él se hallan elementos esenciales del racismo clásico el que, sin embargo, renuncia a la terminología propia del mismo, como el concepto de raza”[10] que ha sido dejado de lado por la ciencia del siglo 21[11].

A continuación, el asesino múltiple, se refiere a las razas, que hace sinónimo de cultura y hasta de religión. Se queja de personas como yo o como tú que, “Ni siquiera CREEN en la raza” y que tienen la desfachatez de decir que la raza no existe y, sobre todo, a aquellos a los que esto ni siquiera les importa. Prosigue diciendo que hay que “Asegurar que los pueblos del mundo permanezcan fieles a sus tradiciones y creencias y no se debiliten y corrompan por la influencia de los extranjeros”.

Los cristianos podemos dar testimonio de que el cristianismo es una religión universal y universalista. El universalismo cristiano se fundamenta en que el mensaje de salvación va dirigido a todos los hombres y mujeres, de todos los tiempos y de todas las etnias, sin considerar frontera alguna. De manera que estamos ante a una religión abierta a todos, independientemente de su origen étnico[12].

Pero, el terrorista no es no cristiano. Es más, sus ideas y su atentado es lo más contrario al cristianismo que pueda existir. Él mismo reconoce su posición frente al cristianismo: “Pregunta: ¿Era / es usted un cristiano? Respuesta: Eso es complicado. Cuando lo sepa, se lo diré”. Se lo puedo decir yo: claramente Ud. NO es cristiano. Usted se halla en las antípodas del mensaje de Jesús. Su panfleto y su actuación son exactamente lo contrario a la enseñanza de Cristo.

Se describe a sí mismo como un “un etnonacionalista ecofascista”. Y exige “Autonomía étnica para todos los pueblos con un enfoque en la preservación de la naturaleza y el orden natural”[13]. Rechaza lo que él llama la nueva “utopía multicultural”. A la supuesta “nueva utopía multicultural”, yo le llamaría “sociedad abierta”. Con Popper, pienso que el “tránsito de la sociedad tribal a la sociedad abierta es un shock” y en este proceso de tránsito surgen fuertes movimientos reaccionarios[14] que pretenden lograr un retroceso, echar hacia atrás los punteros del reloj o las hojas del calendario. En esta categoría se incluye el etnopluralismo o el etnonacionalismo, del cual este hombre es un representante, o más bien, una horrible marioneta.

En la supuesta entrevista que se hace a sí mismo, se pregunta “¿Qué te hace creer que hay diferencias raciales y que esas diferencias son importantes?” y se responde a sí mismo: “Investigación y datos. Haplogrupos, fenotipos y pruebas globalizadas. Con el tiempo, la verdad será revelada”. Los conspiranoicos como este asesino múltiple siempre te cuentan que ellos saben más que los demás, que conocen la verdad y nosotros no la conocemos. Insisten en que los demás no sabemos nada. Más adelante, dice que a nosotros nos lavaron el cerebro. Claro, ellos son los “iniciados”, los “iluminados”. Nosotros -pobres mortales- somos ignorantes. Pero, a la larga, “la verdad”, se conocerá o “será revelada” quién sabe por quién y todos les daremos la razón a ellos. Él asegura que él estará preso durante 27 años, luego se sabrá la verdad, él saldrá libre y le darán el Nóbel de la Paz[15].

El terrorista se refiere a Brasil. Dice que ese país “con toda su diversidad racial, está completamente fracturado como nación, donde la gente no puede llevarse bien, separarse y segregarse siempre que sea posible”. Yo diría que el problema de Brasil no es racial, ni racista. Una amiga brasilera me explica que su país, más que racista, es muy clasista (problema de la mayoría de los países de Latinoamérica, donde incluso los mismos self-made-people tienen la tendencia a volverse clasistas).

Carl Schmitt, en su librito sobre Derecho internacional se refiere explíticitamente a Brasil. Critica a Mello Franco[16], el delegado brasilero ante la Liga de las Naciones[17]. Explica que el brasilero no tiene derecho a “imponer sus ideas a Europa”, ideas que Schmitt critica duramente como “unvölkisch”, esto es, que van contra la idea de pueblo, en sentido racista y nacionalista. Sostiene que Mello Franco propugna la asimilación de los pueblos y el concepto de Schmelztiegel, melting pot o crisol de etnias[18]. Y que, con esto, Brasil quiere inmiscuirse en la política europea. Recordemos que Schmitt plantea la validez de la Doctrina Monroe[19] (América para los americanos) como asimismo, la validez de la doctrina de la hegemonía alemana en Europa[20], que considera su esfera de influencia.

Por ello, no me extraña en absoluto que, décadas más tarde, el diario alemán escrito por admiradores de Carl Schmitt, llamado Junge Freiheit[21] (“libertad joven” que, de joven y de libre, nada tiene), critique el “modelo brasilero” como “mezcla y nivelación al más bajo nivel de civilización”[22]. Parece que Brasil es, desde hace mucho, un anti-ejemplo para este tipo de gente. Me pregunto si dirán hoy lo mismo con Bolsonaro a la cabeza…

Un vistazo a Wikipedia nos otorga claridad sobre el tema. La enciclopedia explica que “Brasil ha sido el crisol de culturas por excelencia porque desde tiempos de la colonia, los criollos portugueses favorecieron la asimilación y la tolerancia de otras etnias, y los matrimonios interraciales eran más aceptables en Brasil que en las otras colonias del continente”[23]. Porque ha sido “el crisol de culturas por excelencia”, por eso, no les gusta. Aunque los expertos de escritorio de la extrema derecha primermundista y sus aliados ultraconservadores poco y nada saben de Brasil.

Schmitt cita lleno de admiración al “canciller del Reino Adolf Hitler”, quien en el Reichstag delineó “nuestro pensamiento de pueblo nacional socialista”[24] [25]. Pensamiento que garantiza el “derecho a la defensa para los pueblos alemanes” que viven fuera del Reich, para que no se asimilen[26], no sean “absorvidos” por los pueblos eslavos y, sobre todo, combate la idea del melting pot o Schmelztiegel, como se denomina en alemán[27].

Más adelante, Schmitt menciona nuevamente “los ideales del Schmelztiegel” o del melting pot[28], con los que parece obsesionado. Critica la “mezcla de pueblos” que tuvo lugar durante la decadencia del Imperio romano. Y la asimilación y melting pot actual de las grandes democracias occidentales. “Mientras los imperios occidentales se entregaban a los ideales de asimilación y del crisol”, el Reich defendía “la santidad de un orden de vida no universalista” y étnico[29], sostiene.

Volviendo al escrito del terrrorista, este confiesa que “La nación con los valores políticos y sociales más cercanos a mí es la República Popular de China”. Me pregunto si Schmitt estaría de acuerdo con esta aseveración. Y más adelante: “Como son tan fuertes, China se convertirá en la nación más dominante del mundo en este siglo, aunque carece de diversidad?” En otras palabras, le gusta China porque teóricamente no se ha mezclado con otros pueblos. Qué pena que el pobre terrorista haya nacido en Australia, que es un melting pot y no en la República popular China.  

En suma, hoy como ayer, hay gente que propugna, que anhela, que añora la soledad de los pueblos. El aislamiento de las etnias, de los grupos que tienen tales o cuales características corporales externas y poco importantes. Hay que hacerles frente.


[3] En su Manifiesto, denominación con la que emula al terrorista noruego de extrema derecha y asesino en serie, Breivik, de quien dice haber recibido una “bendición”. Cuando cite entre comillas sin referencia expresa, me estaré remitiendo a este “escrito”.

[4] El concepto es de Liane Bednarz, en: AfD und Pegida – Angriff auf die liberale Gesellschaft Ella habla de “weltweite Apartheid”.

[5] Pese a que es australiano, llama la atención que hable tanto de Europa. Llo explica así: “¿Qué es un australiano, pero un borracho europeo? Es broma, pero Australia es una colonia europea, particularmente de acciones británicas y, por lo tanto, una extensión de Europa”. De su escrito en internet, la traducción es mía. En adelante, citaré su texto sin más referencia.

[6] Qué gran impacto ha tenido esta ideología en la población me tocó vivir una vez que mis hijos tocaban en el piano de la casa, música de películas de Walt Disney y un amigo mío alemán que estaba presente, los reprendió y les dijo que deberían tocar solamente música alemana.

[9] “Para garantizar que los diversos pueblos sigan siendo diversos, separados, únicos, sin diluir, sin restricciones de expresión y autonomía cultural o étnica”.

[13] Sobre un supuesto “orden natural”, ver mi columna El Nuevo Orden según Carl Schmitt

[15] “No solo espero ser liberado, sino que también espero un premio Nobel de la Paz. Como se le otorgó al terrorista Nelson Mandela una vez que su propio pueblo logró la victoria y tomó el poder”.

[16] Se trata de Afrânio Mello-Franco, quien, entre 1924 y 1926 fue delegado de su país ante la Sociedad o Liga de las Naciones, en Ginebra. No es normal que en un texto de análisis jurídico se mencione en esta forma a una persona; honra a Mello Franco que Schmitt lo mencione y lo critique tan duramente.

[17] También llamada Sociedad de las Naciones 

[18] Todo esto en la página 46 de su obrita de tan sólo 82 páginas.

[19] Schmitt dedica todo el capítulo segundo de su librito a la Doctrina Monroe.  

[20] Cfr. El nuevo orden en el derecho internacional, según Carl Schmit “Como dice Hannes Stein: Europa sería el gran espacio del Reich alemán, el continente estaría sometido a Alemania”.

[22] “Das brasilianische Modell würde völlige ethnische-kulturelle Vermischung und Nivellierung auf den simpelsten zivilisatorischen Nenner bedeuten”. El artículo es de 1999.

[23] “….Sin embargo, esto no significa que la sociedad brasileña ha estado exenta de luchas étnicas y de explotación de las minorías raciales y que algunos grupos hayan decidido separarse de la principal tendencia social de la vida del país. Los brasileños de ascendencia europea conforman casi 50% de la población del Brasil, aunque el número de personas de origen étnico mixto se ha ido convirtiendo en un segmento cada vez más grande de la población. Aproximadamente dos quintas partes de la población son mulatos (mezcla de europeo y africano) y mestizos (mezcla de europeo e indígena)” Del artículo de Wikipedia, sobre crisol de culturas

[24] “auf der Grundlage unseres nationalsozialistisches Volksgedankens”, pág. 46. El lenguaje es muy claro.

[25] A ver si alguien se atreve a decir que Carl Schmitt no fue un nazi. Ver también ¿Fue Carl Schmitt un nazi?

[26] Schmitt menciona positivamenteuna declaración conjunta polaco-alemana de 1937.

[27] Págs. 46 y 47.

[28] Pág. 51.

[29] Während die westlichen Imperien „Assimilierungs- und Schmelztiegelidealen” frönten, verteidigte das Reich „die Heiligkeit einer nichtuniversalistischen, volkhaften, völkerachtenden Lebensordnung”, en: Dan DinnerRASSISTISCHES VÖLKERRECHT* Elemente einer nationalsozialistischen Weltordnung

El Papa en Myanmar y los rohinya

¿Por qué va el Papa a Myanmar? Se preguntaban algunos, si en Myanmar no hay católicos, respondían. Peor aún: después de Myanmar, ¡viaja a Bangladesch!

El Papa Francisco viaja a Myanmar —que antes se llamaba Burma o Birma— y a Bangladesch por el tema de los rohinya. Los rohinya son —según las Naciones Unidas— “la minoría étnica hoy más perseguida en el mundo”, por ello, el viaje del Papa es especialmente “delicado”. Lo que ocurre en Myanmar es un verdadero “modelo” de “limpieza étnica”. Si es que a algo tan deplorable, se le puede llamar “modelo”.

La crisis de los rohinya es la catástrofe étnica —y religiosa— más grande de estos momentos. Myanmar es un estado pluriétnico; sin embargo, se niega a los rohinya la calidad de minoría. Mi opinión es bien clara: hay que defender los derechos de los demás como si fueran propios.

Tal como antes, el Papa Francisco viajó a la isla de Lampedusa —solo, ningún político italiano lo acompañó— viaja hoy a Asia, a apoyar a la minoría musulmana en un país mayoritariamente budista. Generalmente, pensamos que los budistas se lo pasan meditando y no pueden hacer daño a nadie, ni siquiera a una mosca, ya que la mosca puede ser la reencarnación de quién sabe qué ancestro. La “depuración étnica” de los rohinya en Myanmar y también las numerosas acusaciones de abusos sexuales en contra de “maestros” budistas en Europa de hoy, nos demuestran lo contrario.

Después del viaje papal a Lampedusa, los europeos importantes empezaron recién a preocuparse del tema de los refugiados que morían en el Mediterráneo, razón por la que Francisco habló del gran cementerio en que se habría convertido el Mar mediterráno.

El Papa no quiere sucumbir ante la internacional de la indiferencia. Y nos remueve, nos remece para que no caigamos en la trampa del indiferentismo frente a la suerte de los demás, de todos los demás hombres y mujeres. No, no somos partidarios de la ideología según la cual “el hombre es el lobo del hombre”, tampoco creemos en un darwinismo social, de acuerdo al que sobrevivirá el más fuerte, no somos animales salvajes.

No, una persona —cualquiera que sea su etnia o su religión— que sufre o que muere en el mundo, víctima de persecusión religiosa o racial, es un hijo o una hija de Dios. Su muerte está completamente de más y nunca nos deja indiferentes. Un hermano es un hermano, todos somos hijos del mismo Padre celestial, es el mensaje católico desde siempre y para siempre, aunque algunos no quieran oirlo.

Le adviertieron al Papa que no mencionara expresamente la palabra “rohinya”, esto es, la minoría musulmana que Aung San Suu Kyi denomina “inmigrantes ilegales”. Intrusos, los llaman otros. Inmigrantes que, hace muchas generaciones los británicos llevaron a Myanmar a trabajar. Sus abuelos, bisabuelos o tatarabuelos llegaron para trabajar y quedarse en la antigua Birma. De ninguna manera son inmigrantes ilegales. Y aunque lo fueran… ¿Significa esto que no tienen derechos? ¿Significa esto que no hay que respetar su dignidad humana? ¿Sus derechos fundamentales? Para hablar con Juan Pablo II: ¿significa que no son persona? Por algo, Francisco le ha lavado los pies a más de un inmigrante en la Pascua romana, para escándalo de muchos.

El Papa, ayer en su discurso ante las autoridades de gobierno, no los nombró expresamente. Según sabemos, esto se lo habría pedido el clero católico de Myanmar, para no tener ahora ellos mismos problemas, debe ser horroroso vivir así, con ese miedo… Pero todos saben que Francisco se refiere a ellos, a los rohinya. Sí, el Papa Francisco se atreve a ir y entrar en la “cueva de los leones”, como dice el editorial de un diario alemán de hoy, por defender al hombre (me parece escuchar a Juan Pablo II hablar de la defensa del hombre, de todo hombre).

El mensaje papal es claro y es valiente: “el difícil proceso de construir la paz y la reconciliación nacional sólo puede avanzar a través del compromiso con la justicia y el respeto de los derechos humanos”. Los derechos humanos, de esto habla el Papa Francisco, como también habló mucho de ellos, en su momento Juan Pablo II, para escándalo de algunos.

“La sabiduría de los antiguos ha definido la justicia como la voluntad de reconocer a cada uno lo que le es debido, mientras que los antiguos profetas la consideraban como la base de una paz verdadera y duradera”. Francisco no sacaría mucho con citar a Santo Tomás de Aquino, ni a sus escolásticos en Myanmar, por eso, recurre a la expresión “los antiguos” y a su sabiduría.  

“Estas intuiciones, confirmadas por la trágica experiencia de dos guerras mundiales, condujeron a la creación de las Naciones Unidas y a la Declaración Universal de los Derechos Humanos como fundamento de los esfuerzos de la comunidad internacional para promover la justicia, la paz y el desarrollo humano en todo el mundo y para resolver los conflictos ya no con el uso de la fuerza, sino a través del diálogo”. Fantástico Francisco, puedo decir que estos se han convertido en dos pilares de nuestra civilización global, luego de la hecatombe de mediados del siglo pasado: la ONU —tan vilipendiada por algunos— y la Declaración de los Derechos humanos. El desarrollo, la justicia y la paz, valores absolutamente fundamentales, esenciales, imprescindibles; mal mirados por algunos que los consideran como fruto de nuestra ingenuidad. No, no lo son. Son inherentes al respeto de la dignidad humana.


Luego, se refiere al compromiso de Myanmar “por mantener y aplicar estos principios fundamentales”. Esta es más bien una declaración de intenciones. “El futuro de Myanmar debe ser la paz, una paz basada en el respeto de la dignidad y de los derechos de cada miembro de la sociedad, en el respeto por cada grupo étnico y su identidad, en el respeto por el estado de derecho y un orden democrático que permita a cada individuo y a cada grupo —sin excluir a nadie— ofrecer su contribución legítima al bien común”.

Y luego se refiere al tema de cómo las religiones contribuyen a la paz. O pueden contribuir a la paz, podríamos decir: “En la gran tarea de reconciliación e integración nacional, las comunidades religiosas de Myanmar tienen un papel privilegiado que desempeñar”. Sí, en Myanmar, en todos los países del mundo y en todo el mundo.

“Las diferencias religiosas no deben ser una fuente de división y desconfianza, sino más bien un impulso para la unidad, el perdón, la tolerancia y una sabia construcción de la nación”. Cierto, la tolerancia —en el sentido de aceptación, y más aún, de amor por la diversidad— es una virtud profundamente religiosa. Aunque algunos traten de hacer de la religión una excusa para la exlusión, para la lucha y para la segregación, no lo es.

“Las religiones pueden jugar un papel importante en la cicatrización de heridas emocionales, espirituales y psicológicas de todos los que han sufrido en estos años de conflicto. Inspirándose en esos valores profundamente arraigados, pueden contribuir también a erradicar las causas del conflicto, a construir puentes de diálogo, a buscar la justicia y ser una voz profética en favor de los que sufren. Es un gran signo de esperanza el que los líderes de las diversas tradiciones religiosas de este país, con espíritu de armonía y de respeto mutuo, se esfuercen en trabajar juntos en favor de la paz, para ayudar a los pobres y educar en los auténticos valores humanos y religiosos. Al tratar de construir una cultura del encuentro y la solidaridad, contribuyen al bien común y sientan las bases morales indispensables en vistas de un futuro de esperanza y prosperidad para las generaciones futuras.”

El que tenga oídos, que oiga…

Dawkins, Stein y Francisco

Una amiga mía me contó que los hijos de una amiga suya, le habían contado jocosamente que estaban feliz de que su mamá no fuera musulmana, “porque de serlo, ya se habría hecho volar por los aires con un cinturón explosivo”. Como conozco a la familia, no me puedo reir.

Hannes Stein, en una editorial de Die Welt de estos días, se pregunta si tal vez Dawkins tiene razón, cuando sostiene que la religión es una fuerza maligna, ideada por personas mentalmente enfermas[1]. Aunque el zóologo y ex-militante ateo británico hoy sólo agnóstico[2] (algunos lo llaman el “gran exorcista”) habla de la religión como un virus (esto me recuerda a Carlos Marx y su opio), me parece que más que nada, está desilusionado de Dios, como indica -por otra parte- el nombre original de su libro: “The God Delusion”.  

Claro, no es raro que estemos desilusionados de Dios, por todo lo que pasa en el mundo. El grito ¡Dónde estaba Dios en Auschwitz! resuena en nuestros oídos. Yo escucho también la respuesta: ¡Dónde estaba el hombre en Auschwitz! Y hoy: dónde estamos nosotros hoy cuando cientos de personas mueren en el Mediterráneo, en Yemen, en Myanmnar… ¿Dónde está Dawkins hoy? ¿Habrá hablado ya de los muertos en el mar que huyen de la guerra y de la pobreza extrema, como ha hecho Francisco? ¿Habrá visitado ya campos de refugiados sirios, como ha hecho Francisco? ¿Será necesario o suficiente prohibir las religiones para acabar con las guerras?[3]

La amiga de mi amiga empezó bien, queriendo ser una buena cristiana; pero, con el tiempo, se radicalizó[4]. Y lo hizo de la mano de temas que no son propios de la fe, sino más bien de la cultura, de temas “opinables”. Malas influencias ¿tal vez? Pero todos nos hemos visto a “malas influencias” -también a otras buenas- y no nos hemos radicalizado. Tenemos la libertad para decir que no y tomar nuestras propias decisiones

Me sorprende la cantidad de gente otrora razonable que se ha radicalizado[5] durante los últimos años. Y no me refiero a musulmanes, sino a ateos y a cristianos (incluso a “buenos cristianos”) y a gente que antaño podría haber sido calificada simplemente de conservadora o incluso de liberal-conservadora, un término muy popular a fines de la Guerra Fría y también un poco después. ¿Cómo se ha llegado a esto que vemos en el llamado primer mundo?

Quienes tenemos alguna fe decimos que las religiones siembran la paz. Incluso que el término Islam significa paz. Pero curiosamente, algunos -no todos- de los crímenes, de los genocidios más grandes de la humanidad se han cometido o en nombre de una religión o precisamente en contra de una religión. Y esto, desde las Cruzadas o mucho antes, hasta el actual genocidio de budistas contra los musulmanes Rohinya en Myanmar, pasando por la limpieza racial de serbios cristianos ortodoxos contra musulmanes en la década de 1990, para no mencionar los seis millones de judíos asesinados por alemanes antes y durante la Segunda Guerra… La lista es muy larga.

¿Puede ser la respuesta la supresión de la religión? ¿Será necesaria una ley que prohíba la religión? Como la que plantée en mi columna La ley que prohíbe la religión en Europa. Sin duda, esta no sería la solución. Prohibir la religión sería caer en el mismo fanatismo de los fanáticos religiosos que pretenden totalizar su libertad[6], que creen que “mi libertad” tiene que ser total y a mi pinta y todos tienen que bailar con mi música. Sí, defender la libertad supone defender no sólo mi libertad, sinio también la tuya[7].

La respuesta, la solución a las guerras de religión de la temprana edad moderna es la separación entre la Iglesia y el estado, explica Hannes Stein[8]. Este es un proceso que se inició en el Norte de Europa, luego de la Guerra de los Treinta Años, es cierto que con ella no se terminaron las guerras europeas; pero al menos, desapareció una de sus causas o al menos una de sus excusas.

No obstante, la relación entre lo religioso y lo político en la sociedad va mucho más allá de la relación iglesia-estado[9]. “El elemento religioso nunca debe confundirse con el político. Confundir el poder espiritual con el poder temporal significa someterse uno al otro”[10]. Estamos ante una especie de clericalismo, en que un grupo de laicos se une ecuménicamente y se autoconstituye en mentor intelectual de un movimiento político que dice representar al cristianismo. Yo estoy a favor de respetar irrestrictamente la autonomía de lo político.

Hoy, católicos y protestantes viven puerta a puerta y no se les ocurriría matarse unos a otros por haber sido bautizados en diferentes iglesias[11]. Paulatinamente, durante los siglos XVIII y XIX, los beneficios de una convivencia pacífica se expandieron también a los judíos europeos (y americanos) y a los pocos musulmanes que vivían en estas latitudes (en Polonia y Austria-Hungría, por ej.).

Si este mismo proceso -iniciado por cristianos noreuropeos en países con diversidad confesional- se expandiera a países de África y de Asia, habríamos ganado mucho. Habríamos dado muchos pasos hacia adelante. Siempre hay gente -también en el primer mundo- que quiere volver a la época de las Cruzadas. Lo que tenemos que combatir con todas nuestras fuerzas es un retorno al pasado de divisiones religiosas. Me temo que estamos frente a un enorme peligro latente. Una gran responsabilidad recae sobre nuestros hombros.


[1] Editorial de Die Welt, 24.10.2017, página 3. Online: Religiöser Wahn

[2] Hay que decir, por otra parte que Dawkins no rechaza de plano la existencia de Dios, sólo considera  como muy baja la posibilidad de su existencia. Ver de Alan Posener: Besonders bei Katholiken bin ich skeptisch, en Die Welt de 16.09.2007.

[4] Hace años, en un encuentro con ella, me retó y gritó en público, porque me atreví a defender a la mujer que trabaja fuera de la casa, lo que ella no aceptaba. Según ella, las mujeres deben quedarse en casa cuidando a sus niños.

[6] “…una forma particular de proclamación de la defensa de la “libertad religiosa”. La erosión de la libertad religiosa es claramente una grave amenaza dentro de un secularismo en expansión. Pero debemos evitar que su defensa se presente en los términos fundamentalistas de una “religión en total libertad”, percibida como un desafío virtual directo a la laicidad del estado”. En EVANGELICAL FUNDAMENTALISM AND CATHOLIC INTEGRALISM: A SURPRISING ECUMENISM 

[7] Me temo que el proceso mental es más o menos el descrito por el periodista polaco “Das Justizwesen in Polen wird gleichgeschaltet” en entrevista con la radio alemana DLF: “Die PiS versteht Demokratie rein als ein Wahlergebnis. Sie glauben, wenn sie vom Volk gewählt werden, wenn sie eine Mehrheit haben – sie haben die Mehrheit im Parlament, trotz sie nur 37 Prozent der Stimmen bekommen haben -, aber sie verstehen das so, wenn sie eine Mehrheit haben, dann können sie alles durchsetzen im Parlament. Sie können die Spielregeln im Parlament missbrauchen. Sie können die Justizunabhängigkeit beschränken. Sie können einfach alles. Das ist wirklich ein skurriles, kurioses Verständnis der Demokratie. Und jetzt versuchen sie, die Leute davon zu überzeugen, dass das, was in den Gerichten geschah, sehr falsch war, korrupt war, und somit muss es eine Säuberung geben. Die Gerichte müssen gereinigt werden”.

[8] Editorial de Die Welt, 24.10.2017, página 3. Online: Religiöser Wahn

[9] Joaquín García-Huidobro, “Tentación del poder”, Editorial Andrés Bello, Santiago de Chile, 1986, pág. 75 y otras muchas páginas.

La ley que prohíbe la religión

Antecentes

El proceso que llevó a la controvertida ley europea de 2030 comenzó muchas décadas antes; pero, se puede decir que los hechos decisivos que llevaron finalmente a su dictación, tuvieron lugar en el lapso de tres años, a partir de 2027.

En efecto, el año 2027 tuvo lugar en Madrid un atentado terrorista islámico de grandes proporciones y más de quince mil muertos. Una serie de explosiones sacudió la capital española conmoviendo a Europa y al mundo entero. Los terroristas colocaron toneladas de explosivos en distintos lugares de la ciudad, sin que los organismos de seguridad e inteligencia pudieran hacer nada para evitarlo. Se sospecha que órganos de inteligencia estarían infiltrados -a alto nivel de mando- por personas de extrema derecha anti-islámica que querían sacar partido de un atentado protagonizado por musulmanes.

A este gran atentado, siguieron -en toda Europa- acciones no sólo de repudio por parte de musulmanes europeos, sino también de venganza por parte de grupos contrarios a la religión islámica. Musulmanes europeos se distanciaron del terror basado supuestamente en su religión e insisten que los terroristas no actúan en “su nombre”. El famoso #NotInMyName

En 2028, tuvo lugar en Berlín, otro de esos hechos que allanó definitivamente el camino hacia la nueva legislación. Un grupo de cristianos procedentes de las dos grandes confesiones existentes en Alemania (católica y evangélica), realizó una acción coordinada en que destruyó, mediante atentados explosivos, varias mezquitas de la capital alemana. Dejando un total de seis mil muertos. Se lo conoce como el Viernes negro de Berlín. La policía advirtió del peligro; pero fue incapaz de impedirlo.

El grupo que protagonizó la masacre de las mezquitas o Viernes negro de Berlín era conocido como Célula ad maiorem dei gloriam o AMDG. Los llamados de la jerarquía de las iglesias, para que sectores fanáticos, generalmente ultraconservadores, dejaran de lado la violencia fueron rechazados de plano. Cristianos de las dos confesiones se unieron en un nuevo ecumenismo más bien identitario. Los grupos católicos que formaban parte de este llamado nuevo ecumenismo de extrema derecha, acusaban al Papa Valentín de ser un anti-Papa. Los evangélicos fanáticos, organizados en torno a una revista y en páginas de redes sociales, acusaban a los obispos evangélicos de ser apóstatas de la fe verdadera o herejes. Su nueva fe es una mezcla de elementos católicos, evangélicos y ortodoxos, con gran influencia lefevbrista o tradicionalista.

El lunes siguiente al Viernes negro, este mismo grupo de extremistas cristianos se adueñó de un vehículo militar -un oficial del Ejército pertenecía a la célula AMDG- y disparó un misil contra el Bundestag, de tal modo que -aunque aseguran que no era su intención- destruyó el edificio, al desmoronarse debido a que el misil explotó en un lugar del techo que era clave para sostenerlo. Como, en esos momentos, se realizaba una sesión plenaria del Parlamento, murió el 90% de los diputados alemanes, incluyendo al canciller Alexander Pilz.

Pilz -que procedia de una familia de alemanes de Rusia que inmigró al país en la década de 1990- pertenecía a un partido de extrema derecha y era el primer canciller de esa tendencia en Alemania; sin embargo, no era de los más extremos de su partido y había mostrado una actitud conciliadora.

Hubo muchas otras escaramuzas entre grupos cristianos y grupos musulmanes, lamentablemente devastaron sectores enteros en diferentes ciudades europeas. Los enfrentamientos alcanzaron incluso a grupos de la comunidad judía, donde también se organizaron grupos de defensa, de ellos el más importante es el llamado “de los Macabeos”, que se extendió por toda Europa. Hasta algunos budistas europeos se sumaron a la lucha armada, especialmente un grupo encabezado por un ex-policía alemán que anunció el fin del pacifismo budista. En algunas ciudades con abundante inmigración persa, se organizaron “células de Zoroastro”. Yesidas se unieron en grupos de camuflados como clubes deportivos, llamados “Hijos de Melek Taus”.

Algunos hablan de una verdadera guerra civil de origen religioso. La violencia aumentó en las ciudades entre los diversos grupos y células que, muchos de ellos, se unieron con alguna mafia. Esto aumentó el sentimiendo de inestabilidad y violencia de los ciudadanos.

En suma, hubo tres acontecimientos cruciales: el de Madrid y el Viernes negro de Berlín y la descruccón del Bundestag. A partir de ese momento, se puede decir que se llegó a un punto de no retorno. Mucha gente comenzó a comparar la situación con la Guerra de los Treinta Años. Aparecieron libros y películas sobre esa antigua guerra de religión europea. En sus análisis, se dejaba de lado los factores políticos y económicos que la ocasionaron y acompañaron, concentrándose únicamente en el tema religioso. Lo que encrispó aún más los ánimos.

Guerra de todos contra todos

Poco a poco, se fue cristalizando la posición de quienes sostenían que los atentados terroristas de diferentes grupos religiosos o anti-religiosos eran ya insoportables y que la religión sólo causaba violencia. Que era mejor prohibir a todas las religiones para que no hubiese más derramamiento de sangre. Este fue el argumento central para la aprobación de la Ley. Algunos decían que era mejor no tener ninguna religión ya que era imposible preferir una sobre otras.

Que el nivel de desarrollo de la sociedad a mediados del siglo 21 permitía prescindir ya totalmente de las religiones, al menos de las tradicionales. Que Europa habóa entrado definitivamente, a la era positivista de la historia, según la tesis de August Comte, que se popularizó. Las obras completas del sociólogo francés del siglo 19, conocido como crítico acérrimo de la religión, alcanzaron el status de best seller europeo, se dice que se vendían mucho; pero se leían poco…

El Leviathan de Tomas Hobbes fue igualmente muy vendido en esta época, convirtiéndose igualmente en un best seller europeo. Las editoriales se peleaban por quién hacía la edición más bonita y surgieron coleccionistas de Leviatanes. E incluso se realizaron exposiciones de libros y concursos acerca de qué ejemplar era el más hermoso.

En el 2029, Europa se vió azotada por un invierno muy duro, que ocasionó un encarecimiento de los alimentos, debiendo ser importados de otros continentes. A su vez, Rusia subió los precios del gas. Todo esto, llevó a una crisis económica y empobreció a vastos sectores de la población, especialmente en el Sur y en el Este de la Unión Europea, que es donde se concentran los países con más densidad poblacional, los que tienen más votos. Saqueos de grandes y de pequeños almacenes era el pan de cada día entre los hambrientos europeos.

Los llamados del Papa Valentín II (el primer Papa chino de la historia; Lui Yuang Wang es su nombre chino) a la tolerancia, al amor y a la compresión fueron desoídos por los grupos extremos de entre los cristianos, quienes consideran los tradicionales valores del cristianismo como símbolo de debilidad. Ni siquiera los encuentros de Valentín con el Dalai Lama, que llamó a votar en contra de la Ley, lograron el efecto de moderación que esperaban.

Domingo a domingo, se predicaba en las iglesias contra la violencia y a favor del entendimiento y el ecumenismo entre las religiones. Pero los grupos extremos llamaban a no ir a la iglesia y organizaban ceremonias pseudo-religiosas que se transmitían por internet, donde se azuzaba contra todas las religiones, salvo la propia. O simplemente contra todas las religiones, incluyendo la propia. Gente que no iba a misa desde su niñez, no se perdía servicio religioso dominguero donde escuchaba a los nuevos predicadores laicos, que atacaban a las iglesias como traidoras al cristianismo y a la identidad nacional. Y a todas las demás religiones. Otras religiones organizaron también ceremonias por internet; pero ninguna tuvo tanto éxito.

Fue tan enconada la lucha religiosa entre grupos extremistas existentes en la sociedad que no bastó que la mayoría de los creyentes fuera de tendencia moderada. “Siempre ganan los extremistas”, explica el analista austriaco Max Jandl.

El plebiscito  

La ley que prohíbe todas las religiones fue votada en un plebisicto a fines del 2029. La propuesta de ley ganó por un escaso 50,20%. El texto dice:

“Queda absolutamente prohibida toda creencia religiosa. Su ejercicio, propagación, defensa de la misma y todo acto de culto será sancionado con entre diez años de prisión y destierro definitivo del territorio europeo, según la gravedad de la infracción.

“Se considera propagación de una creencia religiosa el poseer un libro religioso, como la biblia, el corán, el talmud y todos los otros similares, tanto en parte, como en su totalidad.

“Dentro de los próximos cinco años a partir de la entrada en vigencia de esta ley, se confiscarán e incinerarán todos los llamados libros sagrados, de todas las religiones y confesiones. Labor que será llevada a cabo por la policía nacional de cada país y por la policía federal europea. Sólo se depositarán dos ejemplares de cada uno de los libros considerados sagrados, en las universidades europeas que lo deseen. Allí permanecerán bajo llave y no podrán acceder a ellos los estudiantes, salvo que tengan un permiso especial del catedrático respectivo. Detalles administrativos, serán regulados por la ley nacional.  

“Las autoridades que controlan el internet deberán destruir todos los ejemplares digitales que existan. E impedir el acceso a libros digitalizados en otros continentes, censurando las páginas que los exhiban en línea. Una violación de estas dos últimas disposiciones será igualmente sancionada con entre diez años de prisión y destierro definitivo, como en el primer párrafo de este artículo.

“Se prohíbe toda acción religiosa o de culto, tanto en lo relativo al nacimiento, como a la muerte o al matrimonio. La infracción de esta disposición se sancionará igualmente con diez años de prisión y destierro definitivo.

“El adoctrimamiento de los menores de edad -incluyendo el de los propios hijos- será sancionado con la pena anterior y además con la pérdida de la potestad sobre los hijos que pasará al estado nacional. El estado nacional se encargará de tomar las medidas necesarias para que los menores de edad sean educados en el patriotismo nacional y en el suprapatriotismo europeo. Se deberá decretar la prohibición de que padres religiosos tengan contacto con sus hijos.

“Esta ley entrará completa y definitivamente en vigencia el 1° de enero de 2031. El periodo entre el 1° de enero de 2030 y el 31 de dieciembre de 2030, se considera un periodo transitorio en que los estados a la Unión Europea deberán tomar todas las medidas y promulgar todas las leyes que sean necesarias para que toda religión quede absolutamente proscrita a partir de la primera fecha mencionada en este párrafo”.  

Los defensores de las religiones o de la libertad religiosa sostuvieron durante la campaña previa al plebiscito que ellos eran la gran mayoría y que nunca perderían un plebiscito tan absurdo como el propuesto. Se supone que esta circunstancia -la seguridad de que ganarían- llevó a muchos partidarios del “no a la nueva ley” a no votar. Su abstención contrasta con la intensa movilización de los partidarios del “sí a la nueva ley”.

¿Qué harán las religiones?

Incierta es la suerte de los creyentes de religiones naturales. La extrema derecha europea insiste en que las religiones originarias de Europa no caen bajo la prohibición religiosa, de manera que esperan un gran auge del culto a Odin. Y a otros dioses, Marte, Zeus, etc. En el norte de Europa, ha comenzado a gestarse un importante movimiento de personas que se consideran druidas y muestran con orgullo sus largas barbas y extrañas vestimentas por las calles de las ciudades. Incluso en Francia y Bélgica ha surgido el culto a Ásterix y Óbelix. Parece que no saben que el nombre del druida de la caricatura es Miráculix y no Ásterix. Se dice que la ley debe interpretarse como prohibitiva sólo de las religiones no europeas.

Por su parte, los budistas insisten en que ellos no son religiosos en el sentido que prohíbe la nueva ley, ya que en su fe no existe un dios personal. Y que el Nirvana no es el Cielo. Sin embargo, en la mayoría de los estados europeos, se piensa que la Ley prohíbe también el budismo. Se advierte que tampoco se admitirá que bajo la apariencia de budismo, se oculten las viejas religiones.

Desde Roma, el Papa Valentín llama a los católicos y cristianos en general, a no condenar a las personas partidarias de la Ley, ya que ellos creen hacer algo bueno, porque nadie actúa suponiendo que hace algo malo. Una pregunta adicional es a dónde se trasladará el Vaticano si se prohíbe la religión en Europa. La Ciudad del Vaticano puede considerarse como extraterritorial; pero los peregrinos no podrán acudir a Roma. Asimismo, sería muy difícil gobernar una  religión global desde un exclave aislado. El Dalai Lama ofrece el Tibet como nueva sede del Vaticano. Las autoridades chinas ven con buenos ojos esta proposición -pese a venir del Dalai Lama- ya que piensan que así su país ejercerá mayor influencia en el mundo.

La Iglesia evangélica alemana partirá hacia Norte y Sudamérica. Esta previsto que su cabeza se instale en el sur de Chile o bien en Argentina, lo que aún no está decidido. Esencial -se dice- será reforzar el gobierno y la cabeza de la misma. Su falta de centralizacón es considerada una de las razones de su débil oposición a los grupos extremos y antirreligiosos dentro de la sociedad.

El éxodo y sus efectos en la economía y finanzas

La ley entrará en vigencia el 1° de enero de 2031; pero sus efectos inmediatos ya se dejan sentir. Se oberva un éxodo de ciudadanos judíos a Israel y a Norte, Sud y Centroamérica. Grandes grupos cristianos huyen o se preparan para ello. Sus destinos preferenciales son también América del Norte y del Sur; la India y Africa, de donde proceden muchos de ellos, o sus familias y antepasados. Musulmanes huyen preferentemente a países del Asia y de África. Quien tiene dos pasaportes están en una situación de ventaja. En estos momentos, bulle el mercado negro de pasaportes robados.

Un gran traspaso de dinero acompaña la emigración, lo que agrava aún más la crisis europea. Pero los estados europeos ven con buenos ojos la confiscación sin derecho a indemnización, de los bienes de las distintas iglesias, establecida en las legislaciones de la mayoría de los países. Asimismo, la confiscación de sinagogas y de mezquitas y centros culturales. De salones del reino de los testigos de Jehová y un gran etcétera. Editoriales, colegios y universidades de las iglesias, de las comunidades judías y de las musulmanas pasarán al estado que, con ello, va a poder sobrellevar un poco los problemas causados por la crisis económica. Esto es bien visto por los partidarios de la ley que dicen que ahora sí Europa saldrá adelante, también en lo económico.

Expertos sostienen que con el metal de campanas y vasos sagrados, bajará el precio de los metales en todo el mundo. E incluso, se piensa que tal vez se puedan obtener metales raros de los ornamentos religiosos, lo que una mayoría pone en duda. El experto David Eggert opina que la crisis será agravada, ya que el precio del oro bajará y ya no podrá ser el puerto seguro, refugio de inversionistas que ya no apuestan por el euro o por otras monedas sobremanera inestables. Estamos pues frente a un proceso de retroalimentación de la crisis y de una situación de gran inestabilidad e incertidumbre.

Los países que acogen a los refugiados europeos han organizado verdaderas acciones para atraer a los mejores cerebros. A los más jóvenes y a los menos enfermos. Los puertos y aeropuertos europeos están llenos de ancianos pobres que no pueden dejar Europa, por no tener país alguno que los reciba. La situación es dramática en algunos países, como Grecia, Turquía y Croacia. En tanto que ancianos con más dinero, procedente del Norte de Europa, simplemente, compran una visa de estadía en algún país de su elección.

El Partido comunista chino no se decide entre promover la inmigración de cristianos, judíos y musulmanes europeos o no hacerlo. Argumentos hay en uno y en otro sentido. Asimismo, la circunstancia de que el Papa sea chino, ha dado al cristianismo un gran auge en la nación asiática.    

Algunos aspectos jurídico-constitucionales

Un sector que antes era contrario a la ley sostiene que “la ley es la ley”, ya que fue aprobada de acuerdo a las normas europeas para los plebiscitos y que ellos la aceptan y abandonan la religión. No puede haber una ley injusta, argumentan. En algunos países, se organizan actos multitudinarios en estadios de fútbol y otros deportes, en que miles de personas abjuran colectivamente de la religión a la que pertenecían, cualesquiera que haya sido.

Otros intentan que la Corte europea de derechos humanos decida en contra de la ley. Pero la Corte ya se declaró incompetente para resolver esta materia. Ningún profesor o profesora de prestigio se atreve a elaborar un informe de peritos contra la ley, por temor a ser juzgados por el delito de defensa de alguna creencia religiosa. Lo mismo atañe a jueces de toda instancia.

El intento de restringir la aplicación de la ley sólo a religiones extra-europeas, especialmente a las llamadas “semitas” no ha tenido éxito hasta ahora, ni a nivel de legislación nacional, ni de hermenéutica administrativa, como tampoco ha sido acogida por los tribunales.

Los partidarios de la ley niegan que con ella se termine con la libertad religiosa, puesto que ahora existirá una verdadera libertad, la libertad de escoger la verdad y no la religión. Esta libertad sería la correcta.

Las legislaciones nacionales que entrarán dentro de poco en vigencia, prohíben a los sancionados con la pena de expulsión del territorio europeo, lleven consigo sus bienes que serán confiscados por los estados nacionales. Se admite llevar sólo lo puesto y una maleta con lo indispensable para el viaje hacia el país que los acoge. Un tema muy debatido es si los emigrantes pueden llevar con ellos sus libros sagrados o éstos tienen que permanecer en Europa para ser incinerados.

Un debate adicional es el planteado por grupos ecologistas que proponen interpretar el término “incineración” de los libros sagrados en forma amplia, permitiendo que éstos sean reciclados y con ellos se haga nuevo papel. Por lo demás, se reduce así la emisión de óxido de carbono o anhídrido carbónico que daña el medio ambiente.

Algunos pocos anuncian que entrarán en la clandestinidad y seguirán practicando sus creencias religiosas al estilo catacumba. Pero la gran mayoría, pretende huir llevando con ellos no sólo todo el dinero que puedan, sus hijos y su cultura, sino también sus libros sagrados. En varios países, se ha establecido un impuesto a la emigración y trabas para sacar bienes o dinero del continente.

Marta Salazar, corresponsal en Europa, Berlín 2030. Seguiremos informando sobre el tema… 

¿Por qué algunos hombres de la AfD se casan con mujeres extranjeras? Y viceversa

Justus Bender, periodista del prestigioso y conservador Frankfurter Allgemeine Zeitung (FAZ), cuenta en su libro[1] que, en eventos de la AfD, varios hombres le contaron que ellos estaban casados con extranjeras. Me quedé pensando: ¿por qué algunos hombres de la AfD se casan con mujeres extranjeras? Leyendo su libro y escuchando uno de sus podcast[2], me acordé de una chica centroamericana que conocí alguna vez. Tendría unos 30 años, y estaba casada con un alemán que trabajaba en la policía de prisiones. Tenían varios hijos pequeños y estaba esperando uno más[3].

Fue hace pocos años, en el último o penúltimo curso de retiro al que asistí. Ella habló mucho -y eso que el retiro era en silencio- sobre la Alternativa para Alemania (la llamada AfD). Nos advertía a las demás participantes del retiro, en voz alta y fuerte, que “la AfD no es nazi”. Se quejaba que, en la sociedad y en “los medios”, se la calificara como tal. Su marido, nos explicó, era del partido, de la AfD.Nadie en el retiro la contradijo, nadie le pidió que se callara, ya que era un retiro en silencio. 

Como de costumbre, inicié una ronda de preguntas en Twitter. La primera pregunta fue ¿por qué algunos hombres de la AfD se casan con mujeres extranjeras? Por qué ciertos hombres escogen a mujeres extranjeras, pese a que el partido pretende logar una “Alemania para los alemanes” y se queja de la presencia de extranjeros en las calles de Alemania, como hizo Meuthen en el último congreso del partido en Colonia[4].

Philipp Kurowski? me da una respuesta muy interesante: “Si tú te fijas, sólo están en contra de los hombres extranjeros. ¿Conoces el concepto de androfobia?”[5]. No, la verdad es que no la conocía.La androfobia es s la fobia contra los varones[6], no frente a las mujeres. Linksevangelikal? responde jocosamente: “debemos suponer que, entonces, a las mujeres de la AfD no les gustan ni los hombres, ni las mujeres extranjeros”[7] 🙂

Kurowski? continúa: “nadie, en AfD tiene algo contra las mujeres extranjeras siempre que cuidan a los niños, a los ancianos y a los enfermos y que mimen a sus hombres”. Y agrega que “todas estas son actividades no son propias de las mujeres emancipadas y que trabajan fuera de la casa”[8]. Claro, esos mismos sectores se quejan de la emancipación de la mujer alemana, que ya no es la buena ama de casa, figura tan tradicional en la cultura de Alemania del pasado. 

En esta misma línea de pensamiento y en otro foro, una joven amiga alemana me dice que -para este tipo de hombres- la mujer alemana[9] es una mujer “mala” que castra al hombre y lo exclaviza[10]. En otras palabras, varones a la antigua, partidarios de los roles tradicionales, buscan a mujeres dispuestas a realizar labores tradicionales y las únicas que están dispuestas, son mujeres extranjeras. Lo que yo he visto es que, algunas veces, algunos hombres, piensan que las mujeres extranjeras efectuarán estas labores; pero, en realidad, no lo hacen. Y es aquí donde surgen los problemas[11].

Kurowski continúa explicándome que los hombres extranjeros son vistos como una competencia, tanto en el mercado laboral como en el “mercado matrimonial”. Y agrega que el hecho que sostengan que los hombres extranjeros son “una amenaza contra nuestras mujeres” es una expresión del propio miedo”[12].

El diputado de la AfD en Berlín Andreas Wild[13], responde a otro twittero: “Ud. es todavía joven y cambiará de opinión cuando todas las mujeres atractivas tengan una relación con los migrantes”. Perdón… las mujeres alemanas atractivas… Y las que el diputado de la AfD considera no atractivas… ¿esas mujeres sí pueden irse con los extranjeros? ¿Qué clase de sexismo más horrible es este? Es, por lo menos, el atavismo según el cual “los extranjeros nos quitan las mujeres”. En Twitter, alguien se refiere al sexo-nacionalismo 🙂

Klaus Jarchow? sostiene simplemente que estos hombres necesitan una persona que haga el aseo en su casa, alguien que se encargue de la limpieza…[14]. Después de haber observado a algunos matrimonios -y no sólo con mujeres extranjeras- me temo que Klaus lamentablemente, no está demasiado lejos de la realidad.

Igualmente, en Twitter, virtual_s_i_m? comenta que aquí se mezcla el sexismo con el racismo y ambos se potencian. El rol de la mujer, en sectores de derecha europea, es más bien pasivo. Sí, la mujer sería pasiva y por tanto, inofensiva y sumisa; sólo así no significa un peligro para el hombre que es activo[15].

En una oportunidad, una conocida mía criticaba a una amiga mía extranjeras -que no estaba presente en la conversación- debido a que “salía mucho” y por tanto, no se habría preocupado de sus hijos, ni de su casa y marido…[16]. O sea, mi amiga criticada no era una mujer “para adentro”, “casera” y sumisa, el ideal femenino, para quienes les gustaría volver a la década de 1950. Según la periodista Bettina Hoffmann, la AfD tiene una imagen de la mujer que, en el mejor de los casos, corresponde al siglo pasado[17].

Mi amiga S. me da otra explicación: “es más fácil vivir con alguien que no habla muy bien el idioma. Así, no se pueden ambos comunicar al mismo nivel y no se verá tan fácilmente confrontado con las propias debilidades intelectuales y humanas”. Sí, es cierto, muchas extranjeras no tienen idea de alemán al casarse, algunas nunca lo aprenden, o bien, saben sólo lo suficiente para comprar en el supermercado, cocinar y limpiar. Pero no para leer el diario, ni un libro, ni un buen artículo periodístico. Creen todo lo que les cuenta el marido… Nunca le dirían que su opinión política es errada.

S. continúa: “Además, esas mujeres, muchas veces, tienen problemas con la visa, de manera que quedan en una situación de dependencia. Esa mujer no va a escapar tan fácilmente, y prefiere contenerse, ocultando su situación, para no ponerse en peligro”[18]. Triste realidad…

Hasta ahora, las respuestas han contestado la pregunta ¿por qué hombres de la AfD se casan con mujeres extranjeras? Pero el tema, tiene otra dimensión, que plantea Linksevangelikal?: ¿por qué mujeres extranjeras “se meten” con estos hombres? ¿Por qué se involucran con quienes desprecian lo que me hace lo que soy?[19].

Buena pregunta de Linksevangelikal? quien, nos hace ver que hay mujeres con un background migratorio, como algunas señoras procedentes de Rusia, muchas de ellas tienen también la tendencia política favorable AfD[20]. No olvidemos que incluso hay un importante grupo organizado de ruso-alemanes dentro de ese partido[21]. Justo ayer salió un artículo en el mismo FAZ sobre el tema, titulado “los rusos son los mejores alemanes”[22].

Hay mujeres que piensan que casándose con un “buen cristiano” tienen la vida arreglada. Porque ellas creen que un buen cristiano será un hombre bueno, como muchas veces son los buenos cristianos en sus países: misericordiosos. Me temo que este pueda ser el caso de la centroamericana que menciono más arriba. Pero resulta que ellas no saben que, para algunos europeos, el cristianismo es más bien, una ideología con la que ellos pretenden diferenciarse de los demás. Una barrera frente a otros. Un mecanismo de identificación nacionaliista. Y son lo menos misericordiosos que hay.

Mia amiga O. me dice que puede ser que ellas piensen que con él tienen su futuro económico asegurado. Sí, también puede ser. Y el de su familia en el país de origen, por las remesas de dinero que pueden enviarles a alguna zona montañosa y pobre del planeta.

Mi amiga A. me dice que “porque muchas veces te casas rapido y te das cuenta muy tarde”. También es cierto… Una amiga mía se casó (el matrimonio acabó muy mal y deepués de la separación, todo fue aún peor) luego de dos meses de conocer a una alemán de pelo ya blanco; pero de ojos azules, precisamente porque le gustaban sus ojos azules… Conozco a miles de hombres de ojos azules que no sé si podrían hacer feliz a alguien.

Finalmente, mi amiga S. me habla del fenómeno llamado en inglés Racial Fetishism. De acuerdo a Wikipedia[23], “el fetichismo racial consiste en fetichizar a una persona o a una cultura o grupo étnico que no es el propio”. Un fetiche es, en este sentido, el esteretipo de un cuerpo -también puede ser de una cultura o bien de una forma de ser- que se convierte en objeto de una patológica satisfacción sexual. “El fetichismo racial implica el deseo de una persona de otra cultura a menudo porque son diferentes, y por lo tanto ‘exóticos’”. OMG! Esto lo he visto muchas veces en Alemania. El gran interés por “las mujeres asiáticas, por las mujeres de color y por las latinas, consideradas exóticas, son ejemplos de fetichismo racial”.

El “síndrome del ‘fetichismo asiático’  nace del deseo masculino de dominación y del estereotipo de las mujeres asiáticas como individuos abiertos a la dominación”. Hace un par de días, en Twitter, me interpeló un alemán de extrema derecha que tenía en su perfil, fotos de mujeres tailandesas. Wikipedia continúa explicando: “Ellos ven a las mujeres de su propia raza como demasiado orientadas hacia la carrera y muy fuertes. Las mujeres asiáticas son la antítesis de su percepción de las mujeres” alemanas[24].

Las mujeres de color y las latinas son vistas como hipersexuales. Las mujeres negras representarían la “fiebre de la selva” salvaje. Continúa Wikipedia: las latinas simbolizan la fecundidad y el deseo sexual. Por eso, no es raro que un hombre que quiera tener muchos hijos, busque una latina. No olvidemos que la AfD dice expresamente que cada mujer debería tener, al menos, tres niños. Las latinas son consideradas “un poco díscolas”; pero es preferible una “díscola” a una Emanze, palabra despectiva que describe con desprecio a una mujer emancipada alemana[25]. “Emanze” es un término despectivo lamentablemente, muy usado en Alemania, al igual que el de Rabenmutter o madre desnaturalizada.

Mi amiga S. me dice que el fetichismo racial no es un fenómeno muy estudiado en Alemania, hasta ahora. Pero creo que hacerlo sería sumamente necesario. Muchas veces, se habla del tema, como si fuera algo bueno y demostrara la apertura de los hombres frente a los extranjeros… más bien a las extranjeras. Me temo que de apertura poco y nada hay. De convertir a la mujer en objeto, de eso, hay mucho.

El fetichismo racial no es un tema inocuo, sino uno que ha hecho sufrir a mucha gente, si te casas con alguien que no te ama a ti, sino características raciales de tu cuerpo o de tu cultura (hipersexualidad, fecundidad, incluso ser “buena madre”, mujer sumisa al servicio de su marido), de alguna manera eres considerada intercambiable[26], sobre todo si te han encontrado a través de una agencia o después de unas cortas vacaciones.

Debe ser aún peor si descubres que la imagen que tú tenías de él es igualmente falsa. Y que, en realidad, él desprecia a los extranjeros… Abiertamente o en forma encubierta, Incluyéndote a ti, aunque te necesita. 

Esta columna es una primer intento de respuesta. Si tú tienes más ideas o tesis, te pido que las escribas en el foro de este artículo -aquí abajito- o en Twitter (@MartaSalazar) o bien en la página de mi blog en Facebook


 

[1] Was will die AfD? Eine Partei verändert Deutschland (¿Qué quiere la AfD? Un partido cambia a Alemania?). De la editorial Pantheom, del grupo editorial Random House. 2017. Su cirección en Twitter es @JustusBender

[3] Las circunstancias están un poco “cambiadas”, para -como dicen en las películas- “proteger a los inocentes” 😉

[4] “Gerade in jüngster Zeit aber gehe ich aber sehr bewusst durch die Straßen meines Landes, meiner Stadt. Und wenn ich an einem Samstagmittag im Zentrum meiner Stadt unterwegs bin, mit offenen Augen, wissen Sie, was ich dann sehe? Ich sage das wirklich ohne jede Übertreibung: Ich sehe noch vereinzelt Deutsche”.

[5] Wenn du drauf achtest: Sie haben nur was gegen ausländische Männer. Gibt es den Begriff #Androphobie schon? (Respuesta de @PhiKuro, de 25 de mayo 2017).

[6] Androphobie. Ver significado 1 en Wiktionary “sehr ausgeprägte (krankhafte) Angst oder Abneigung vor Männern”.

[7] “Weiter gedacht: #AfD-Frauen hingegen mögen sowohl keine ausländischen Frauen als auch keine ausländischen Männer, wenn ich das richtig sehe”. (Respuesta de @konvivenz, de 26 de mayo).

[8] “Niemand in der AfD hat etwas dagegen, dass ausländische Frauen hier auf Kinder aufpassen, Alte & Kranke pflegen und Männer “verwöhnen”. Alles Lücken in ihrem traditionellen Weltbild, die durch emanzipierte, berufstätige Frauen hier entstehen”.

[9] Bió-alemán se dice de la persona que procede de una familia originariamente alemana, esto es, sin ascendientes extranjeros.

[10] “…die biodeutsche Frau ist eine böse, entmannende Feministin. Sie verwandelt sich direkt in Gollum und versklavt den Mann”.

[11] Hace años, conocí a una cubana que me contó que su marido la había traído a Alemania para que cuidara a su mamá ya anciana… Lo que ella, en realidad, no quería hacer. La semana pasada un amigo mío casado con una extranjera me contó que, cuando él se casó, su propio papá quería que la nuera cuidara a la suegra.

[12] Nuevamente, el 25 de mayo: “Männer dagegen sind Konkurrenz: auf dem Arbeitsmarkt, auf dem Heiratsmarkt. Die Bdrohung für “unsere Frauen” ist ganz eigene Angst”.

[13] Andreas Wild, MdA @AndreasWildAfD: “Sie sind noch jung. Vielleicht ändern Sie Ihre Meinung, wenn alle für Sie attraktiven Frauen, in einer Beziehung mit Migranten sind” (Tweet de 25 de febrero de 2017).

[14] “Sie brauchten eine “Putze”, nehme ich mal an”. (Respuesta de @Chat_Atkins, de 25 de mayo)..

[15] “Da multipliziert sich Sexismus mit Rassismus. Wo ich dir recht gebe: Frauenbild d Rechten red. Frau auf 1 Rolle, d passiv. Harmlos, unterwürfig ist. Daher passiv u weniger “gefährlich” in Ggsatz zu “aktivem” Mann (zB in d Trope “Frauen wegnehmen”)” (Respuesta de @_S_i_m_X, de 26 de mayo).

[16] Fue una de las tantas “las conversaciones de sobremesa y las de mesa, las de pasillo y las del paseo”. Ver ¿En qué se parecen John Boehner y yo? 

[17] AfD Ein Frauenbild aus dem vorigen Jahrhundert, columna de Bettina Hoffmann.

[18] “Es ist einfacher, mit jemandem zusammenzusein, der die Sprache nicht richtig kann. Da muss man nicht auf Augenhöhe kommunizieren und wird nicht so schnell mit den eigenen intellektuellen und menschlichen Schwächen konfrontiert. Außerdem sind diese Frauen häufig aufgrund von Visumsangelegenheiten in einer Art Abhängigkeitssituation. Die Frau läuft dann nicht so schnell weg und verkneift sich sicher auch viel, um ihre Lage nicht zu gefährden”.

[19] “Warum lassen sich ausländische Frauen auf solche Männer ein? Warum mit Partnern einlassen, die verachten, was mich ausmacht, was ich bin?”.

[20] “Manche Frauen mit Migrationshintergrund haben wohl auch eine gewisse Nähe zur AfD, etwa russlanddeutsche Frauen”.

[21] Organizados, como siempre, en Facebook: Russlanddeutsche in der AfD

[23] Me refiero al artículo en inglé sobre Racial fetishism, que cito en los párrafos siguientes.

[24] Wikipedia se refiere a las norteamericanas; pero, en este caso, veo exactamente el mismo fenómeno.

[25] Recuerdo el caso de un alemán que, me contaron en una convivencia, que se había casado recién con una española y los comentarios de las demás señoras fue “qué bueno, porque con una alemana los hombres, ya no se pueden casar, porque son emancipadas. Pero con una española, las españolas son tan católicas, con ellas sí se puede casar…”. Hago notar que todas las señoras presentes y que se expresaban en tales términos, eran alemanas.

[26] De interchangeable women habla el artículo 5 Signs You’re About to Be Racially Fetishized que me recomendó mi amiga S.


 

Popper y el mandamiento del amor al prójimo

Ama a tu prójimo”, dice la Sagrada Escritura y no “Ama a los de tu estirpe“, Karl Popper[1].

En momentos, en que una Europa recibe a refugiados de la guerra de Siria, una minoría muy ruidosa los rechaza e incluso ataca. Incluso y pese a los acuerdos de la Unión Europea, algunos estados del Este del continente, se niegan a acogerlos. Para qué hablar de Trump y su Muslim Ban…[2] Creo que, ante este panorama, puede servir traer un poco a la memoria el pensamiento de Popper. Más aún cuando un sector de quienes los rechaza, recurre a Popper e incluso a la Biblia en su intento de justificar su comportamiento.

La frase es de “La sociedad abierta y sus enemigos”, el libro más conocida de Karl Popper, una obra emblemática del pensamiento democrático y libre del siglo 20. Popper es unpensador liberal agnóstico que, generalmente, no hablaba de religión. Rechazaba, para sí, tanto el “ateísmo arrogante”, como la fe judía o la cristiana[3]. (Venía de una familia de “judíos asimiliados” de Viena).

El filósofo liberal explica que este pensamiento del amor al prójimo y no a la estirpe, a la propia familia, a la nación o a la etnia en la que se nace, es el núcleo de todas las enseñanzas de nuestra civilización. Ningún otro pensamiento ha tenido, en la historia del desarrollo moral de la humanidad, una eficacia más grande que la de esta idea[4].

Kant la recogió en su máxima de la razón práctica: obra de tal manera que la humanidad, tanto de tu persona, como de la persona de los demás, no sea nunca un medio que utilizas, sino un fin[5] [6]. En otras palabras, todo ser humano -incluyéndome a mí misma- es un fin y nunca puede ser usado, nunca nos podemos aprovechar de los demás, ni verlos como un medio para lograr cualquier cosa. No, todas las personas, cada persona es un fin y no un medio, no es una cosa. Este es el principio que debe guiar nuestro actuar.

Popper describe el mandamiento del amor al prójimo como expresión de individualismo en combinación con el altruismo y agrega que esta doctrina central del cristianismo se ha convertido en el fundamento de nuestra civilización occidental[7]. En este sentido, se puede decir que la civilización occidental está fundada en el cristianismo. Soy yo, como individuo, quien actúa; mi actuación es siempre altruista. El altruismo hace que me comporte de manera que mi actuación beneficie o pueda beneficar a otros. Es -por decirlo de una manera fácil- lo contrario del egoísmo. El altruísmo es la palabra no religiosa para designar el amor al prójimo.

Es evidente que el cristianismo que llama a amar al prójimo y no sólo “a los nuestros”. Es lo que se llama al universalismo cristiano[8]. De ninguna manera, el cristianismo puede ser rebajado y utilizado como un elemento de identidad nacional, ni menos aún, en esta misma línea espúrea, usarlo como una barrera que se coloca frente a los demás, Por ej., frente a refugiados, homosexuales, extranjeros o creyentes de otras religiones. O no creyentes.

Siguiendo la idea de Popper, pienso que, en momentos en que algunos (pocos, pero muy bulliciosos) vuelven a rechazar a otras personas, a grupos de personas, hay que actuar como nos recomienda Leon Botstein: dejar de lado la actitud en que sólo se defiende los derechos del propio grupo. Cada uno, cada una de nosotros, tiene que defender los derechos de todos los demás como si fueran los propios derechos. Los derechos de toda persona, aunque sea diferente o perteneza a una minoría[9]. O precisamente por ello[10].

Esta lección de humanidad es la piedra de toque de la civilización occidental. Por el contrario: vociferar por las calles en contra de extranjeros, refugiados, asilados, inmigrantes, de blancos, negros o amarillos no sólo no es occidental, sino que tampoco es civilizado.


[1] “Liebe deinen Nächsten”, sagt die heilige Schrift, und nicht “Liebe deinen Stamm”, Karl Popper. Die offene Gesellschaft und ihre Feinde. Francke Verlag München, 4a. edición, 1975. Pág. 146.

[3] Popper äußerte sich nur selten über Religion. (…) Demnach beschrieb er sich selbst als Agnostiker und lehnte für sich den seiner Ansicht nach arroganten Atheismus ebenso ab wie den jüdischen und den christlichen Glauben. Wikipedia

[4] “Und er ist der Kern aller ethischen Lehren, die aus unserer Zivilisation erwuchsen und sie anregten. Zum Beispiel ist er auch Kants zentrale praktische Lehre (‘Handle so, daß du, die Menschheit sowohl in deiner Person als auch in der Person jedes anderen jederzeit zugleich als Zweck, nie als bloßes Mittel gebrauchst.’). Kein anderer Gedanke hat in der moralischen Entwicklung des Menschen eine so mächtige Wirksamkeit entfaltet”. Págs. 146 y 147.

[5] Idem.

[6] Otras traducciones del llamado imperativo categórico, en Wikipedia: Formulaciones.

[7] Dieser mit dem Altruismus vereinigte Individualismus ist die Grundlage unserer abendländischen Zivilisation geworden. Er ist die zentrale Lehre des Christentums. Pág. 146.

[8] Ver mi columna El universalismo y los refugiados

En su también insigne obra sobre el racismo (“Rassismus”, pág. 68, de 2004. En inglés “Racism. A short History”, Princeton 2002.) George M. Fredrickson hace ver que la finalidad principal del Nuevo Testamento es la Salvación de toda la humanidad. Por otra parte, la creencia en la descendencia de Adán y Eva nos hace hermanos y hermanas. Es muy interesante el capítulo I sobre religión y racismo.

[9] Ver mi columna Y si pasa algo…

[10] No sé por qué pienso en el poema de Martin Niemöller:

Cuando los nazis vinieron a buscar a los comunistas, guardé silencio, porque yo no era comunista. Cuando encarcelaron a los socialdemócratas, guardé silencio, porque yo no era socialdemócrata. Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas, no protesté, porque yo no era sindicalista. Cuando finalmente vinieron a buscarme a mí, no había nadie más que pudiera protestar.

El poema tiene innumerables versiones y variaciones; pero esta es la original

La crítica y el progreso en “La sociedad abierta” de Karl Popper

Crítica

Hace unos días, vi una conferencia en que un intelectual judío alemán de izquierda, le dice a otro intelectual igualmente judío-alemán pero conservador[1]: “antes yo estaba contra el sistema y ahora, me veo defendiéndolo”. Sí, tal vez es lo que nos pasa a muchos no conformistas, a personas de espíritu crítico y que lo cuestionábamos todo. Y seguimos cuestionándolo. Pero hoy, parece que hoy -obligados por las circunstancias, defendemos más de lo que criticamos. Rebus sic stantibus, podríamos argumentar…

Como -hace ya muchas décadas- nos hizo ver Karl Popper “hay una diferencia esencial entre la crítica en una sociedad democrática y la critica totalitaria a la sociedad democrática”[2]. O sea, hay que distinguir… distinguir entre los tipos de crítica. Lo que vemos ahora, en nuestro día a día europeo, es una crítica autoritaria a la sociedad liberal. Frente  a esa crítica, que consideramos injusta[3] y sumamente peligrosa, muchos de nosotros, nos vemos en la necesidad de defenderla.

Es cierto que los enemigos de la democracia no son muchos (entre 10 a 15% dependiendo del país); pero, como dice Ovidio, “combate la enfermedad desde un comienzo, no prepares la medicina cuando el mal se ha hecho ya muy fuerte, debido a tu vacilación”[4].

El filósofo liberal continúa: “la crítica de Sócrates era democrática; de hecho, era una crítica del tipo que es necesaria para la supervivencia de la democracia”. Que una crítica sea necesaria para la supervicencia del sistema es algo que soprenderá a algunos. Como me comenta un amigo: la crítica es el motor del progreso. Sin este enfrentarse y pensar críticamente sobre algo, no avanzamos.

Si estamos siempre conformes con lo que tenemos, nunca podremos superarnos, ni llegar más lejos. Permaneceremos siempre en el mismo lugar. No vamos a poder crecer como personas, ni como sociedad, ni mejoraremos el sistema. No progresaremos, no seremos mejores. Es un poco aquello que la sabiduría popular ha acuñado en la frase: “el que no avanza, retrocece”, que no es una frase ni de Lenin, ni de Marx, sino que nada menos que de San Agustín[5].

Que, en una democracia, la oposición es imprescindible, es algo que igualmente se puede derivar -a contrariu sensu- de la premisa de Popper según la cual, los “demócratas que no distinguen entre una crítica amigable y una crítica enemiga de la democracia, están prisioneros del espíritu totalitario”[6]. Yo diría que son pseudo demócratas.

Un verdadero demócrata, una verdadera demócrata, no sólo acepta la crítica y la oposición, como un mal necesario, sino que la promueve, la favorece, la defiende como una institución necesaria, buena e imprescindible. El sistema democrático de gobierno requiere una oposición que hace posible la alternancia en el poder., ya que “la alternancia en el poder es, pues, condición sine qua non de la democracia”[7]. Como se repite tantas veces, para Popper, es la alternancia en el poder llevada a cabo en forma pacífica -o sin derramamiento de sangre- lo que distingue  un sistema democrático de uno que no lo es.  

La oposición tiene que ser, eso sí, responsable, en lo posible constructiva y no destructiva. Capaz y dispuesta a llegar a acuerdos. El adversario político tiene que ser eso, un rival y nunca un enemigo[8]. Algunas veces, estaremos de acuerdo; otras veces, no. Pero nunca se puede perder el respeto por el oponente.

En general, la crítica no va dirigida sólo “al sistema” como tal, sino también, a los partidarios de diversas tendencias políticas dentro de la sociedad plural  y abierta. La crítica es -por así decirlo- intrasistemática, se halla dentro del sistema y no pretende destruirlo. Por lo tanto, la crítica tiene que ser, no sólo tolerada como un mal menor, sino que la podemos tranquilamente fomentarla; promocionar, alabar, elogiar a quienes la hacen, ya por el solo hecho de hacerla, aunque no estemos de acuerdo con ellos.

En otras palabras, es bueno que no estemos todos de acuerdo y que discutamos. El mismo común denominador: el sistema o rayado de la cancha y muchos numeradores diversos al otro lado de la línea divisoria. Esto es lo sano y debería ser lo normal. Ver el mismo objeto desde distintos puntos de vista es enriquecedor: de un lado se le ve cócavo y, desde el otro convexo[9]. De un lado, es un seis, del otro, es un nueve.  “Estamos divididos en el color; pero unidos en lo fundamental”[10].

En esta misma línea, lo que no podemos admitir es la crítica de los intolerantes, de aquellos que quieren destruir, que están en contra del sistema democrático liberal de gobierno. Ello, porque “en nombre de la tolerancia, tenemos que reservarnos el derecho a no tolerar la intolerancia”[11]. Ojo que Popper no dice que no podemos tolerar a los intolerantes, como se traduce muchas veces erróneamente en castellano[12], sino a la intolerancia. A las personas, siempre las tenemos que aceptar. Su maldad, no[13].

No podemos caer en el error de los intolerantes: “Un régimen totalitario naturalmente nunca puede ver cualquier crítica como amigable, ya que cualquier crítica de la autoridad coloca el principio de autoridad en tela de juicio”[14]. Y creo que no es necesario trasportarse idealmente a un régimen totalitario, hay demasiadas personas con mentalidad totalitaria o autoritaria[15].

Los autoritarios de hoy mucho tienen que ver con las personas con mentalidad servil que existieron en el pasado. Sí, aunque ellos hablen, sin parar, de libertad y pretendan levantarse contra supuestas elites que consideran opresoras y a las que, generalmente, ellos mismos pertenecen o han salido de ellas. Lo que temen realmente es perder sus privilegios, su posición excepcional dentro de la sociedad.

Progreso

Popper nos explica que tanto Platón, como los historicistas (Historizisten) creían en la existencia de una ley del destino (Schicksalgesetz) cuya vigencia y rigor no se pueden detener. Según esta ley, a medida que pasa el tiempo, las sociedades decaen, declinan y se desmoronan. Es la ley de la decadencia histórica[16]: el tiempo trae consigo inexorablemente “los males del cambio y de la decadencia”[17]. Le degeneración racial lleva a la decadencia de las costumbres y de ahí a la declinación del estado como tal, hay sólo un paso[18].

El cambio se ve siempre como un mal y como una señal de decadencia. Cualquier semejanza con la realidad actual es pura coincidencia[19]. Platón sostiene que la ley de la declinación, del decaímiento es muy difícil de parar, ya que es una “ley del destino”[20]. Me pregunto cuánto de esto hay en la tendencia actual que denominamos pesimismo cultural [21] [22].

Sin embargo y contradiciendo al historicismo estricto, “Platón es de la opinión que nos es posible romper la ley de hierro del destino y evitar así la decadencia”[23]. En otras palabras, la ley de hierro del destino, según la cual, las sociedades humanas se acercan cada vez más -a medida que pasa el tiempo- a su ruina y que los historicistas reconocen como un proceso inevitable y fatal, puede ser rota, quebrada, detenida… Puede ser detenido el proceso que no sería pues totalmente irrevocable. Platón da una esperanza y ofrece un programa:

El filósofo griego explica que nuestro mundo en movimiento no es ni siquiera real, sino que es una copia de un mundo anterior, perfecto e inamovible que no podemos ver[24]. (Recordemos el mito de la caverna). Si el estado perfecto es el antiguo, el pre-existente, todos los estados -o sistemas políticos- que le sucedieron, son degenerados o, al menos imperfectos[25]. Es más, este estado es real, y no fantástico, ya que, debido a su estabilidad, es de una realidad superior, ya que no está sometido al cambio de la realidad social que es efímera[26].

Debemos detener todo cambio, ya que todo movimiento es malo. Por el contrario, la tranquilidad, el sosiego, el reposo o como se lo quiera llamar, es divino[27]. Para Platón, todo lo que promueva inamovilidad y acreciente el poder del estado, es derecho, es justicia. Popper llama a esto una barbarie, una barbaridad[28].

El ideal platónico es un estado perfecto que no conoce el cambio. Es perfecto precisamente porque no cambia, por eso es el estado ideal que propone fundar[29]. Sostiene que la ley del cambio y la decadencia se puede detener si se evita toda variación, reforma, modificación. Su idea es que el estado permanezca para siempre igual. Que sea un estado petrificado[30] en una edad de oro[31], en una arcadia (utopía romántica e idílica), que durará mil años[32]. Esto de los mil años me parece peligrosamente conocido…[33] 

Para Platón, la perfeccción se encuentra en la falta de movimiento. Las cosas que cambian son imperfectas. Sólo las inamovibles, las inmóviles, las inmutables son perfectas[34]. Pienso que, muy por el contrario, es más que obvio que, si todo tiene que seguir igual, no puede haber avance, ni progreso. Sin movimiento, sin cambio, no hay mejora, desarrollo, ni auge, tampoco ascenso, sólo estagnación, sino retroceso. Ya lo decía San Agustín[35] y lo que el santo africano sostenía respecto a la vida espiritual, se aplica también a la vida social y política, para qué hablar de la económica.

Sí, siempre ha habido personas que se aferran al pasado e ideas como las platónicas les sirven de excusa para justificar su resistencia al normal devenir del tiempo. Gente que ve en todo cambio, algo peligroso, que no ve las oportunidades, sino sólo el mal y pone avisos de “peligro” en todas partes. No distinguen, no disciernen. Temen todo cambio y luchan por mantenerlo todo como está, aduciendo erróneamente, que el mundo debería ser presidido por una especie de ley inmutable[36], por un orden pre-establecido que ellos conocerían. Serían una especie de demiurgos que nos indican lo que tenemos que hacer o no hacer. Permanecen anclados en el pretérito, sin entender el devenir de la historia, ni aceptar, ni reconocer progreso alguno.

Si todo está gobernado por una ley inamovible, entonces, el progreso no sólo está demás, sino que contradice la norma suprema de la inamovilidad. Esto, que parece absurdo es la base de teorías ultraconservadoras, reaccionarias, autoritarias actuales, que no sólo quieren mantener las cosas como están, sino que intentan volver al pasado o hacernos great again, con acento en el again[37].  

Me parece que quienes piensan así, por lo menos carecen en absoluto del don de discernimiento, puesto que no todo cambio es bueno, ni tampoco todo cambio es malo, hay que saber distinguir. Esta capacidad de discernirnimiento es -por otra parte- la quintaesencia del pensamiento conservador, que se diferencia esencialmente de las ideas autoritarias, tradicionalistas, totalitarias o ultraconservadoras a las que nos enfrentamos hoy[38].

Nada tiene que ver con un sano conservadurismo de raíz liberal-conservadora[39], sino que más parece una expresión romántica de una ética tribal[40]. Recordemos que -para Popper- lo contrario de la sociedad abierta, su antónimo es la sociedad tribal[41] (Stammesgesellschaft), basada en los ancestros, en la familia, o más que en la familia, en la tribu, de ahí su nombre. Tal distinción cobra hoy una gran relevancia en Europa, donde grupos autoritarios -una minoría muy bulliciosa- rechaza a quienes desean o se ven obligados -como refugiados de guerra- a integrarse a la sociedad europea[42]. Por tal razón, se ha vuelto a hablar de la sociedad abierta y a releer la obra de Popper.  

Hace dos años encontré el libro de Popper, “La sociedad abierta”, en un anticuario de Celle (en Niedersachsen) por un precio módico. Le he leído, releído y hecho leer, siempre con mucho provecho. Lo recomiendo 🙂


[1] Si mal no recuerdo, los intelectuales eran Micha Brumlik y Michael Wolffsohn; pero como no encuentro la cita, prefiero no escribir sus nombres en el texto de este artículo, ya que puede ser que me equivoque.

[2] “Aber es gibt einen grundlegenden Unterschied zwischen einer demokratischen und einer totalitären Kritik an der Demokratie”, pág. 254. En adelante, las citas de Karl R. Popper son de su libro Die offene Gesellschaft und ihre Feinde. Francke Verlag München, 4a. edición, 1975.

[3] Vienen a mi memoria las palabras de Chesterton en 1932: “en este momento la democracia esta siendo atacada y, lo que es más, atacada injustamente”. En Democracia y Capitalismo G. K. CHESTERTON No sin razón, muchos sostienen que vivimos una especie de deja vu, en que regresamos a la década de 1930. Los defensores del autoritarismo actual recurren a los autores de esa época, en quienes se inspiran. Lo que no deja de ser terriblemente significativo.

[4] Principiis obsta. Sero medicina parata, cum mala per longas convaluere moras.

[5] “Avanzad, hermanos míos; examinaos continuamente sin engañaros, sin adularos ni pasaros la mano. Nadie hay contigo en tu interior ante el que te avergüences o te jactes. Allí hay alguien, pero uno al que le agrada la humildad; sea él quien te ponga a prueba. Ponte a prueba también tú mismo. Desagrádete siempre lo que eres si quieres llegar a lo que aún no eres, pues donde hallaste complacencia en ti, allí te quedaste. Mas si has dicho: «Es suficiente», también pereciste. Añade siempre algo, camina continuamente, avanza sin parar; no te pares en el camino, no retrocedas, no te desvíes. Quien no avanza, queda parado; quien vuelve a las cosas de las que se había alejado, retrocede; quien apostata, se desvía. Mejor va un cojo por el camino que un corredor fuera de él. Vueltos al Señor”. Del SERMÓN 169 Traductor: Pío de Luis, OSA

[6] “Demokraten, die nicht den Unterschied zwischen einer freundschaftlichen und einer feindseligen Kritik der Demokratie sehen, sind selbst in totalitärem Geiste befangen”, pág 254.

[10] Cfr. Europa endlich mal lieb haben “In Berlin sagt Silvan Wagenknecht: Wir sind vielleicht in der Farbe getrennt, aber in der Sache vereint”. #pulseofeurope

[11] “Im Namen der Toleranz sollten wir uns das Recht vorbehalten, die Intoleranz nicht zu tolerieren”.

[12] En inglés se refiere a las personas y no a la intolerancia: “We should therefore claim, in the name of tolerance, the right not to tolerate the intolerant”. 

[13] El liberalismo de Popper es liberalismo y, de ninguna manera es esa caricatura intolerante y totalitaria de los libertarios que han surgido en algunos países. Me refiero grupos que se hacen pasar por liberales, en circunstancias que son reaccionarios misatrópicos. La dignidad de la persona está en el centro del liberalismo.

[14] “Ein totalitäres Regime kann natürlich überhaupt keine Kritik als freundschaftlich ansehen, denn jede Kritik einer Autorität muß das Autoritätsprinzip selbst in Frage stellen”, pág. 254.

[16] “Gesetz des historischen Verfalls”, pág. 46.

[17] “Übel der Veränderung und des Verfalls”, pág. 46.

[18] Cfr. pág. 46.

[19] “Any resemblance to reality is pure coincidence”, como se dice en las películas 😉

[20] Schicksalgesetz, pág. 47.

[21] “Cultural pessimism arises with the conviction that the culture of a nation, a civilization, or humanity itself is in a process of irreversible decline”, en Wikipedia 

[22] El pesimismo cultural, es una inclinación, una postura o creencia que observo, sin excepción y abundantemente, en los grupos autoritarios actuales. E incluso entre grupúsculos cristianos ultraconservadores, pese a que el pesimismo cultural es lo más contrario al cristianismo que pueda existir. Este convencimiento de que estamos en un proceso irreversible de decadencia.

[23] “Platon war der Ansicht, daß es uns möglich sei, das eherne Schcksalsgesetz zu durchbrechen und den Verfall durch das Anhalten aller Veränderung zu verhindern; dies zeigt, daß seinen historischen Neigungen wohlbestimmte Grenzen gesetz waren”. Pág. 47.

[24] Pág. 124.

[25] “Der vollkommene Staat ist sozusagen der erste Vorfahren, der Ahnherr der späteren Staaten, die gleichsam die degenerierten Nachkommen dieses vollkommenen oder besten oder “idealen’ Staaten darstellen”, pág. 51.

[26] “eines idealen Staates, der nicht bloße Phantasie, noch ein Traum, noch eine ‘Vorstellung in unserem Geiste’ ist, sondern dem angesichts seiner Stabilität höhere Wirklichkeit zukommt als jenen verfallenden, dem Wechsel unterworfenen Gesellschaftsordnungen, die in jedem Augenblick vergehen kännen”, pág. 52.

[27] “Bewegung ist übel, Ruhe göttlich”, pág. 126.

[28] La palabra Barbarei es en alemán mucho más fuerte y significativa que la “barbaridad” en castellano. Pág. 151.

[29] “die Gründung eines Staates zu verwirklichen,der nicht verfällt”, der sich nicht verändert, und der eben deshalb von den Übeln aller anderen Staaten frei ist. Der von den Übeln der Veränderung und des Verfalls freie Staat ist der beste und vollkommenste Staat. Er ist der Staat des goldenen Zeitlaters, das keine Bewegung kannte”. Pág. 46.

[30] “Er ist der zum Stillstand gebrachte, der versteinerte Staat”, pág. 46.

[31] “der Staat des goldenen Zeitalters”, pág. 46.

[32] “Die Prophezeihung der Wiederkehr des Goldenen Zeitalters, eines neuen tausendjähriges Reiches, die wir im ‘Staatsman’ finden”, pág. 46.

[33] Hitler anució oficialmente, el 1° de septiembre de 1933 que el estado que él dirigía, el llamado „Drittes Reich“ (tercer Reino) duraría mil años. Wippermann, Benz y otros, citados en Wikipedia

[34] Pág. 47.

[35] Ver nota 5.

[36] Cfr. pág. 38. O 28 en el ejemplar en GoogleBooks en castellano. “Oft scheint es, als versuchten sie sich über den Verlust einer stabilen Welt zu trösten, indem sie an der Annahme eines unverämderlichen Gesetzes festhalten, das die Veränderung beherrscht”.

[38] En realidad, más conservadores moderados debería levantar su voz frente a la derecha (europea) autoritaria y que intenta imjustamente apropiarse del término conservador. Un buen intento de hacerles frente en: “Die Rechten dürfen sich den Konservativismus nicht aneignen”, en Das Konservative muss vor den Rechten geschützt werden (Lo consevador tiene que ser defendido de la derecha).

[39] Invito a leer mi columna Los conservadores de hoy, enemigos de la sociedad abierta Donde escribo conservador, léase autoritario, en el sentido en que lo describí en  Liberales y autoritarios en vez de izquierda y derecha

[40] Popper habla de una “romantische Stammesethik”. Pág. 42.

[41] Cfr. pág 15 en GoogleBooks en castellano.

[42] “quien siente miedo frente al cambio -que actualmente se expresa, sobre todo, en el pluralismo y en la apertura de nuestra sociedad- se encuentra en peligro permanente de ser paralizado por ese miedo (…) En el caso de los conservadores, este ideal positivo se encuentra en el pasado, al menos en el pasado como ellos se lo imaginan. Con su mirada nostálgica y melancólica, dirigida hacia una supuesta edad de oro es lo que reemplaza la esperanza de un mejoramiento de la sociedad”. Ideas del autor liberal Clemens Schneider, en mi columna Los conservadores de hoy, enemigos de la sociedad abierta 

 

La Nueva guerra fría

¿Estaremos realmente frente a una nueva guerra fría? EEUU acaba de declarar persona non grata a 35 diplomáticos rusos y lo mismo casi hizo Rusia[1]. Es muy fácil, muy simple comparar la situación actual frente a Rusia con la Guerra fría que vivimos en la segunda mitad del siglo 20, entre los llamados dos bloques. Pero ¿será una comparación correcta?

Pienso que la mayor diferencia es que Rusia está hoy aislada, sola en el mundo. Hace no mucho tiempo (cuando disentir no era aún tan difícil para los ciudadanos rusos), una periodista de esa nacionalidad posteó en Twitter una foto del embajador ruso ante las Naciones Unidas y en la sala plenaria. La periodista comentó que a su alrededor no había nadie sentado. Agregó que a eso ha conducido la política de Putin: al total aislamiento de su país[2].

Bueno, no exageremos, Rusia tiene algunos aliados de ocasión e incluso permanentes. A veces Irán -interesada en la tecnología atómica rusa-; a veces China[3]… que además, es aliada de todos los que hacen negocios con ella, y de nadie. Se puede decir que China es aliada sólo de sí misma. Anne Applebaum @anneapplebaum hace ver acertadamente que lo que une a las elites rusa y china es su rechazo a las instituciones democráticas y liberales de Europa occidental, de EEUU, de Japón y de donde sea[4].

Al igual que Rusia, China es miembro permanente del Consejo de Seguridad, donde veta animadamente todo tipo de resoluciones, muchas veces, secundando a Rusia, como ha ocurrido reiteradamente en resoluciones sobre Siria. En realidad, China no apoya a Putin, sino que sostiene una política de absoluta no intervención en otros países. Si aceptara una intervención, debería admitir que otros países juzgaran la política interna de China, con sus violaciones a los derechos fundamentales.

Argentina (duranté el régimen de los Kirchner) y Cuba fueron sus aliados hasta hace poco. Hoy siguen siéndolo Venezuela y Nicaragua, países sin peso en el concierto internacional. Pseudo-incondicionalmente. la apoyan Bielorrusia y Kirgistán, a quienes no les queda otra alternativa, como integrantes de la Unión Eurásica, imitación de la Unión Europea, pero comandada desde Moscú. Los únicos aliados incondicionales de Rusia son Abjasia y Osetia del Sur. Regiones que no son reconocidas por (casi) nadie como países independientes. Simplemente, porque no lo son. En derecho, siguen siendo parte de Georgia, pese a su anexión de facto.

Cuba era su aliada, antes de que Obama anunciara el fin del embargo y visitara la isla. Evidentemente que, para los cubanos, EEUU es un millón de veces más atractivo que Rusia. Por mucho que Putin y el Patriarca Kirill inauguren una iglesia ortodoxa tras otra en la isla caribeña: la rígida Ortodoxia y el animismo cubano simplemente, “no pegan”.

Evidentemente, países como Kasajstán y Bielorrusia apoyan a Rusia en foros internacionales; pero hay que reconocer que eso lo hacen muy a regañadientes y porque son parte de la ya mencionada Unión de Eurasia. Entre paréntesis, yo diría que Putin y Lukaschenko son más rivales que aliados y, si se apoyan, es por razones estratégicas y de dependencia económica.

Bien distinta era la situación de la década de los ‘50, ‘60 ó ‘70, durante la primera y en realidad única Guerra fría, cuando regiones enteras integraban el bloque que consideraba a la Unión Soviética como su hermana mayor, su ídolo y ejemplo a seguir. Dentro del bloque se hallaban países como Siria[5], tenerlo presente es indispensable para comprender la terrible y dolorosa crisis actual en Siria.

Por otra parte, a diferencia de lo que ocurría durante la Guerra fría, Rusia tiene hoy muy poco que ofrecer al mundo. De partida, no tiene una ideología que esté interesada en propagar, como antes, cuando la URSS propiciaba la expansión del marxismo y de la revolución universal. Hoy en día, en vez de partidos políticos marxistas, neo-marxistas o filo-marxistas en todo el mundo, que intentan expandir una gran utopía mundial, Rusia mantiene a una gran cohorte de lobbystas, defendiendo los intereses económicos de sus oligarcas y de empresas estatales en diferentes países.

Aunque el número de sus lobbystas está rápidamente disminuyendo y es sustituido por pseudo-preiodistas de medios financiados por el estado ruso o por oligarcas proclives a Putin. Gente más dedicada a la desinformación que a la información[6].

Rusia propaga hoy por el mundo una extraña mezcla entre la nostalgia de la URSS leninista (no olvidemos que Putin considera que la caída de la Unión Soviética es la mayor tragedia, catástrofe geopolítica del siglo 20[7]), el culto a Stalin y la devoción a la Iglesia ortodoxa, aparte de la homofobia, y el llamado familialismo, que disfrazan como defensa de la familia tradicional, con los que se quiere congraciar con grupos de extrema y/o ultra-ultraconservadores de Europa occidental.

La desmembración -disolución de un estado y su reparto entre estados sucesores[8]– de la URSS es, en Rusia actual, un gran trauma, sobre todo para la jerarquía política y para la oligarquía económica. Su lectura consiste en comparar la caída de la URSS con el Tratado de Versailles, que fundó un orden internacional que llevaba en sí el germen de una nueva guerra[9]. Es bien peligrosa esta comparación, porque, en el fondo sirve para justirficar una nueva gran guerra o muchas guerras pequeñas, o escaramuzas, conflictos congelados, anexiones (como la de Crimea, Osetia o Abjasia) o intervenciones como en Siria o en Ucrania.

En la época de la Guerra fría -cuando demócratas y comunistas se enfrentaban por la hegemonía en el mundo- los cristianos eran más bien los enemigos naturales del comunismo soviético. Hoy, demasiados conservadores han pactado con los enemigos de la democracia y se han convertido inexplicablemente, en los más grandes amigos del oficial de la KGB, experto en desinformación Wladimir Putin[10]. Colectividades como la AfD alemana, la FPÖ austriada, el partido de Le Pen en Francia y Orbán en Hungría son sus mejores aliados en las capitales occidentales.

Paradojalmente o no, hoy no necesitamos a los grupos de extrema izquierda -reducidos a la insignificancia- ya que sus banderas son hoy llevadas en alto por grupos de extrema derecha. Incluso, grupúsculos del llamado catolicismo de extrema derecha ha caído en la trampa y admira más a Putin y al Patriarca Kirill (cabeza de la Iglesia ortodoxa, Patriarcado de Moscú) que al Papa Francisco, a quien desprecia abierta o solapadamente.

Por otro lado, para Rusia, la tesis de la nueva Guerra fría es la expresión de una especie de dolor fantasma[11]. Rusia de Putin no es el Imperio soviético, ni tampoco el de los zares y esto le duele mucho, son dolores nostálgico-imperiales.

La semana pasada, en el marco de la larga conferencia de prensa (dura varias horas) que Putin concede año a año, un periodista le preguntó qué se siente ser el hombre más influyente del mundo[12]. De partida, como dice Smirnova, Putin no es el hombre más influyente del mundo. Pienso que la pregunta revela más bien una inconsciente identificación con él. Algo así como: Putin es Rusia o -en el mejor de los casos- la representa y “cada uno de nosotros, los ciudadanos rusos, somos Putin”. “Si él es influyente e importante, también yo lo soy”[13].

En realidad, el único poder que queda a Rusia es su derecho a veto en el Consejo de Seguridad. Derecho que, ni siquiera le es propio, sino que heredó de la URSS[14]. De ahí que Putin use su veto una y otra vez, casi siempre sin sentido… vetando resoluciones, da más o menos lo mismo cuáles. el veto es una demostración de poder.

La profesora Kadri Liik[15] explica que a Rusia le conviene propagar la tesis de una nueva guerra fría[16]. Y por eso, es parte de su estrategia, divulgar la existencia de un sinnúmero de paralelos entre la Guerra fría y la llamada Nueva guerra fría. Esto, por varias razones. Tal vez la que yo considero más banal es que así une a sus ciudadanos en torno a los gobernantes, por aquello que la teoría política alemana llama el sindrome de Galtieri, en que se crea un enemigo o rival externo, para reunir, para aglomerar a la propia población en torno al gobierno, con el fin de defenderse de supuestos ataques exteriores. Ataques que, en realidad, no existen.

Liik hace ver que la supuesta Nueva guerra fría es asimétrica, ya que Rusia y Occidente no están al mismo nivel. Existe en un desnivel, en favor de Occidente, del otrora llamado mundo libre. Pero, como Putin se maneja muy bien en conflictos asimétricos, la tesis de la Nueva guerra fría alarga la vida a su régimen[17]. Aglutina al pueblo ruso en torno a la jerarquía. No sé si se han dado cuenta que desde hace más de un año, apenas hay protestas contra el gobierno en Moscú y otras ciudades. Y los pocos opositores, terminan o en la cárcel o en la tumba, como Nemzow[18].

Por último, una de las mayores diferencias con la Guerra fría de antaño es que en aquel entonces, al menos, los acuerdos internacionales se respetaban. Ambos bloques trataban de antenerse a reglas mínimas de convivencia. Hoy, Rusia de Putin, interpreta las reglas de la forma que más le acomode.

En suma, hay bastantes razones para disentir de la tesis, según la cual, estamos ante una Nueva guerra fría. Pienso que no podemos caer en el juego, no podemos volver atrás en el tiempo; no retrocedamos a los 50, 60, ni a los 70. La cortina de hierro, gracias a Dios, ya cayó, por mucho que algunos intenten levantarla nuevamente. Estoy segura que no lo lograrán. Claro que esto no es automático, depende de nosotros que no lo logren. Estoy segura que el sentido común pesa más que las fantasías de grandeza imperial o de cualquier otro tipo. La paz es el camino.


[1] El ministro del Exterior Sergei Lawrow anunció la expulsión de 35 diplomáticos estadounidenses. Putin lo contradijo (teóricamente) y decidió que no habrá expulsión de norteamericanos. Como dice la periodista alemana Golineh Atai ‏@GolinehAtai, están jugando al Good Cop Bad Cop.  

[2] Lamentablemente no tengo ni screenshot. Ni me acuerdo de su nombre exacto. Sigo a muchos ciudadanos y ciudadanas rusas en Twitter. Confieso que soy rusófila y por eso, me duele aún más lo que ocurre….

[3] Si China firmó un contrato quasi secreto con Rusia para abastecimiento de energía, lo hizo, aprovechándose se Rusia, impuso un precio muy bajo (las partes no han dicho cuál es el precio, es secreto) a Rusia.

[4] Applebaum, en en el Washington Post, China and Russia bring back Cold War tactics, va más allá y plantea una segunda tesis ”But the elites of both of these countries do have one thing in common: They dislike the institutions of liberal democracy as practiced in Europe, the United States, Japan and elsewhere, and they are determined to prevent them from spreading to Moscow or Beijing. These same elites believe that Western media, Western ideas and especially Western capitalism — as opposed to state capitalism — pose a threat to their personal domination of their economies. They want the world to remain safe for their particular form of authoritarian oligarchy, and they are increasingly prepared to pay a high price for it.”

[5] Siria figura en el mapa como uno de los aliados de la URSS durante la Guerra Fría. Ver el artículo La URSS y los paises arabes durante la Guerra Fria, de Olga Ulianova,  “Siria apoyaba a la URSS en todos los temas de la contraposición internacional bipolar”.

“El posicionamiento de Siria, como principal socio soviético en la región en la primera mitad de los setenta, tenia como antecedentes el inicio de cooperación en los años cincuenta y su ampliación en la siguiente década A partir de 1967 se establecen vínculos a nivel de partidos entre el BAAS y el PCUS”.

[6] No deja de ser sorprendente la “noticia difundida hoy por medios rusos”, de acuerdo a la cual, 700 mil alemanes habrían abandonado Alemania, huyendo de la canciller Merkel y de sus refugiados. Citan a Lutz Bachmann, el fundador de Pegida (organización de extrema derecha xenófoba).  

[7] El escritor ruso Sergej Lebedev hace ver que, si la URSS habría subsistido, Putin hubiese llegado -en el mejor de los casos- a ser un general de la KGB en su provincia natal, Leningrando. Nada más. Ver Ende der Sowjetunion vor 25 Jahren Kollaps einer Weltmacht (Fin de la Unión Soviética hace 25 años. El colapso de una potencia mundial).

[8] Ver mi artículo Consideraciones acerca del actual desarrollo de la doctrina de la sucesión de Estados en el derecho internacional, en la Revista de Derecho Público de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile. Página 28.

[9] Ver, del historiador Michael Stürmer, Geschichte endet nie (la historia no termina nunca), en Die Welt (papel), 28.12.2016. Página 2.

[11] So viel Krise war nie, editorial de Michael Stürmer, de esta semana en Die Welt.

[12] “Estar sentado en el sillón del hombre más influyente del mundo” es la traducción textual. Ver Wie Putin sein fast perfektes Jahr 2016 feiert (Como celebra Putin su año casi perfecto) de la periodista Julia Smirnova, @smirnova_welt en Twitter.

[13] Mutatis mutandi, es lo que promete Trump con su Make America great again. Todos quieren ser grandes, ricos, poderosos e influyentes, como Trump.

[14] En su calidad de una de las potencias ganadoras de la II Guerra.

[15] Senior policy fellow del European Council on Foreign Relations. @KadriLiik en Twitter.

[16] Su artículo “Mit Russland reden, aber wie?” (Hablar con Rusia, pero ¿cómo hacerlo?. En la revista Internationale Politik N° 3 del año 71. Mayo Junio 2016. Páginas 8 y siguientes.

[17] Ver artículo de Liik, página 13 y siguientes.

[18] Boris Jefimowitsch Nemzow asesinado en Moscú en febrero de 2015.

La noche en que ardieron las sinagogas

Traduzco, con su autorización, este excelente artículo de @Karl_Eliyahu, aparecido en su blog derwanderprophet el jueves de esta semana: 9.11.1938 – Der Abend an dem die Synagogen brannten (Las notas al pie de página -todas de carácter explicativo- son mías).

9 de noviembre de 1938 – La noche en que ardieron las sinagogas

Hoy, se cumplen 78 años de la “Noche de los cristales rotos”[1].

El 9 de noviembre de 1938, los judíos alemanes sufrieron los primeros ataques violentos y abiertos de los nazis contra en toda Alemania. El saldo fue: sinagogas incendiadas, negocios judíos demolidos; judíos encarcelados e incluso asesinados por la turba alemana enfurecida. La historiografía nos dice que, con los “pogromos de noviembre de 1938” comienza la Shoah, el exterminio industrial de los judíos europeos, también denominado Holocausto.

Como los cristianos celebraban esa noche la fiesta de San Martín[2], el ruido de las sinagogas ardiendo y del saqueo de los negocios judíos apenas se escuchaba. Aquella fiesta dedicada a honrar a San Martín de Tours, un oficial romano que, en su amor al prójimo, no había hecho distinción alguna entre las personas.

Es una ironía del destino que el pasaje sobre el amor al prójimo se encuentre en la Tora (o Torá), en el mismo libro que los alemanes quemaron esa noche, en el fuego del antisemitismo, un fuego que -durante los pogomos de noviembre- se había vuelto muy real.

“Ama a tu prójimo como a ti mismo”. Kedoschim (soy el Eterno el sagrado), Waijkra 19,18 (Levítico 19, 18)

No fueron sólo miembros de la SA[3] quienes cometieron esas atrocidades contra el pueblo judío, sino también alemanes comunes y corrientes –maridos, padres de familia, hijos amados– personas totalmente normales.

Hay relatos en que se cuenta que los padres -que acompañaban a sus hijos con faroles propios de la Fiesta de San Martín- se quedaban mirando cómo ardían las sinagogas. El público daba gritos eufóricos de alegría y se lanzaban insultos antisemitas que incitaban a los autores de los desmanes. El odio antijudío tenía gran aceptación entre los presentes, muchos de los cuales incluso daban muestras de incontenible alegría. Aquellos que se avergonzaban del odio y de lo que sus conciudadanos estaban demostrando que eran capaces de hacer, se apartaban llenos de vergüenza.

Lo que ocurrió la noche del 9 de noviembre de 1938 ha sido tema de innumerables biografías y artículos científicos y también de la literatura universal. Los judíos alemanes gritaban; pero era un grito silencioso, un grito sordo que nadie quería escuchar en Europa.

Hoy, en este 11 de noviembre, se recuerda en Alemania esa triste noche de noviembre en que las sinagogas ardieron y comenzó el final de la vida judía en Alemania.

Puedo ponerme a llorar cuando veo que, un día como hoy, alemanes de extrema derecha marchan nuevamente por nuestras calles. ¿Realmente se olvida lo que ocurrió en Alemania hace 78 años? ¿No es importante? O ¿simplemente da lo mismo lo que pensemos al respecto?


[1] El término Reichskristallnacht o noche de los cristales rotos, que se utiliza con frecuencia, banaliza o minimiza el horror de lo ocurrido. En efecto, no se trata de haber roso cristales, vidrios, ventanas, vitrinas o escaparátes de tiendas judías.

Hay que considerar que 91 hombres y mujeres judíos, fueron asesinados esa noche. Y que decenas de miles fueron internados encarcelados o internados en campos de concentración. Fueron incendiadas 191 sinagogas y 76, completamente destruídas. Cientos de negocios casas de oración, destruídas y 7000 negocios minoristas, igualmente destruidos. 2.6000 judíos (hombres y mujeres) fueron internados en los campos de concentración de Buchenwald, Dachau y Sachsenhausen. Tomé las cifras de la página Die Pogromnacht – verharmlosend als “Reichskristallnacht” bekannt, de la editorial Tessloff

[2] Fiesta que sigue siendo muy popular en regiones católicas de Alemania. Los niños salen de noche, acompañados de adultos, con faroles, iluminados tradicionalmente con una vela (hoy también hay a pila). (Pueden ver aquí una foto de una década después, en Düsseldorf).

Caminan por las calles de la ciudad cantando y algunas veces, piden dulces en las casas (aquí pueden ver una foto de 2015 de una de estas visitas a las casas). Termina la fiesta con una gran fogata que se hace en alguna plaza o potrero, alejado de las edificaciones, para que el fuego no pase a ellas.

La fiesta se realiza en honor de San Martín de Tours. De él se cuenta una historia de amor al prójimo que se enseña a los niños como ejemplo. Un ejemplo que esa noche muchos de los adultos no siguieron.

Wikipedia narra lo ocurrido: “La leyenda más famosa en torno a su vida de San Martín de Tours sucedería en el invierno de 337, cuando estando Martín en Amiens encuentra cerca de la puerta de la ciudad un mendigo tiritando de frío, a quien da la mitad de su capa, pues la otra mitad pertenece al ejército romano en que sirve. En la noche siguiente, Cristo se le aparece vestido con la media capa para agradecerle su gesto. Esta es la escena que iconográficamente se ha preferido para su representación”.

La escena pintada por el Greco

[3] La organización paramilitar del Partido Obrero nacional socialista o “partido nazi” como se lo llama conúnmente. La SA jugó un rol fundamental en el ascenso de los nacional socialistas durante la República de Weimar. Luego de la toma del poder por los nazis, la SA se convirtió en una especie de “policía auxiliar” estatal. Luego de 1934, en que la cabeza de la SA fue asesinada por gente de la SS, la SA perdió importancia.

Etnocidio o la muerte del pueblo

La semana pasada, escribí el artículo Un fantasma recorre Europa, el fantasma del etnopluralismo. En él, describo qué es esta corriente denominada etnopluralismo, tan popular entre los grupos de extrema derecha en Europa.

Hoy, me gustaría referirme a lo que Henning Eichberg denomina Volkstod o muerte del pueblo. Según este autor alemán que hoy reniega de la extrema derecha a la que perteneció y cuyas ideas siguen siendo muy importantes para este sector, la pecularidad cultural se vería destruida con la mezcla de etnias. Ni siquiera dice que podría ser una amenaza, sino que habla de destrucción. Ya que conduciría a que el individuo perdiera su identidad y esto llevaría finalmente a la muerte del pueblo.

Hay que aclarar que los nacional socialistas y los neonazis de hoy hablan generalmente de la muerte del pueblo o Volkstod. Y los etnopluralistas o partidarios de la nueva derecha, generalmente, de etnocidio. Aunque en el lenguaje político popular extremo, se utilizan ambos términos.

La “mezcla” de culturas o de razas debe evitarse cualquier costo, ya que llevaría primero a la alienación y luego a su destrucción[1] de la cultura o de la “raza”. Lo de cualquiera sea su costo es algo que me deja pensando en… en hasta donde están dispuestos a llegar.

Según el etnopluralismo, cada “raza” debe permanecer homógenea. Las características “culturales” de una nación o pueblo son fijadas como si fueran cualidades biológicas e inmutables. A mi modo de ver, no hay lugar para el progreso. El etnopluralismo sustituye la voz raza por la voz cultura. Pero, en definiiva, viene a ser lo mismo[2].

Los etnopluralistas rechazan la integración de personas provenientes de otras regiones y de otras culturas. (Si es un pequeño porcentaje que se asimila, no importaría mucho, sería como una gota de agua que se diluye en un balde). Ya que, las culturas o naciones perderían así su identidad y particulturalidad cultural. Es, como dice Liane Bednarz, el apartheid a nivel mundial.

La voz humanidad es detestada por los etnopluramistas. La globalización, aún más… Lo mismo que el universalismo, por eso, niegan la validez universal de los derechos humanos fundamentales, ya que su garantía sólo sería propia de los nacionales y no de los extranjeros provenientes de otras culturas con su propio derecho. Volveríamos a una suerte de derecho estatutario (de estatuto personal escuché hablar a filo-fascistas hace ya décadas[3]). El derecho -creación cultural- es parte de una determinada cultura y no es universal. Sobre este tema, volveré más adelante.

En consecuencia, niegan la igualdad y la hermandad universales. Obviamente, rechazan aquello que nos dice el Vaticano II “la familia humana se va sintiendo y haciendo una única comunidad en el mundo”[4]. El Vaticano II no vale para este tipo de gente que trata de utilizar con frecuencia el cristianismo para sus mezquinos fines.

La Gaudium et Spes contiene 21 veces el concepto “familia humana” en su texto. Y senala claramentesu trascendencia: “La unión de la familia humana cobra sumo vigor y se completa con la unidad, fundada en Cristo, de la familia constituida por los hijos de Dios”[5]. Para los etnopluralistas, esta se la mayor de las herejías. Hago ver que los extremistas y etnopluralistas se acercan a grupos que rechazan al Vaticano II.

El etnopluralismo se llena la boca con la religión cristiana que dice defender; pero, es, en realidad, a lo sumo, un factor propio de una supuesta identidad cultural[6] y un elemento de diferenciación, de separación de otros y no de unidad[7]. El etnopluralismo busca la diferencia y no lo que nos es común, no lo que nos une como seres humanos.

Hay que reconocer que tanto de Benoist como los mayores representantes del etnopluralismo, pertenecen más bien lo que llamamos la derecha esotérica. Pero a los cristianos conservadores que se acercan a estos grupos, parece que eso los tiene sin cuidado. Como hace ver Andreas Püttmann, lo más preocupante de esta alianza es que, por primera vez en Alemania post 1945, los conservadores hacen causa común con la derecha radical[8].

Alain de Benoist -el ideólogo de la nueva derecha francesa setentista y uno de sus máximos líderes, un Dugin francés- considera que “el reconocimiento de las diferencias promueve el respeto al otro como otro, sin forzar la asimilación, sin obligarlo a una fusión de su identidad colectiva en una cultura que le es ajena”[9]. En consecuencia, “defenderse” de los extranjeros o de los inmigrantes, que estos grupos llaman “invasores”, no mezclarse con ellos, sería una reacción natural.

En suma, la actuación política etnoplutalista se centra en las siguientes líneas de acción: 1) separar estrictamente a los pueblos, 2) resguardar su homogeneidad[10] y promover su crecimiento demográfico, para evitar la muerte del pueblo. Es lo que dice Frauke Petry, la dirgente máxima de la llamada Alternativa para Alemania: “La política alemana debe garantizar la supervivencia de su propia gente, de su propia nación” alemana[11]. En otras palabras: queremos niños para la nación, para asegurar su supremacía geopolítica o étnica. Etc.

Los extranjeros sólo producirían problemas psíquicos, aumentarían la criminalidad (¿no es lo que dice Trump con respecto a mexicanos y latinos en general?) y conducirían finalmente a la muerte del pueblo, a un etnocidio cultural (kultureller Ethnozid). La migración, el traspaso de las “fronteras naturales de la cultura” conduciría a la violencia destructiva, a trastornos mentales en las personas y a la criminalidad. La sociedad multicultural sería pues, el comienzo de la muerte del propio pueblo[12].

Los refugiados que llegan hoy a Europa huyendo de cruentas guerras en Siria y Irak no pueden ser recibidos, ya que, de acuerdo al europluralismo, una persona no puede traspasar los límites de su zona cultural sin provocar graves daños. Toda migración contradice la ley natural[13]. A lo sumo, pueden ser internados en campos de internación, hasta que pase la guerra y puedan volver a su país. Pero de integración, nada…[14] Entre paréntesis, ¿saben por qué la ley natural está tan desprestigiada actualmente? Por este tipo de menciones.

A mí me queda muy claro por qué partidos como la AfD rechaza a los refugiados y, en general, a los extranjeros. La NPD quiere enviarlos de regreso y von Storch nos asegura que los refugiados no deben integrarse a la sociedad alemana[15].  Tal como de Benoist nos habló antes contra la asimilación de los inmigrantes.

De Benoist, en su confusión lingüística -en que da a cada palabra un significado totalmente distinto al que tiene- se atreve a sostener que el etnopluralismo significaría la defensa de la pluralidad genética, sin la cual, la especie (se refiere a la especie humana, ya que no puede hablar de la humanidad) moriría[16].

De acuerdo al autor francés, el universalismo y el liberalismo llavarían al etnocidio, ya que, debido a su igualitarismo, a la desaparición de las fronteras, a la eliminación de las diferencias, llevaría a que desaparecieran las etnias[17]. Pienso que una de las características del racismo, la fuente de la cual nace, es precisamente negar la posibilidad de superar las diferencias[18].

Okay, a ver si entendí: si las “razas” se mezclan, moriría la raza o cultura determinada y, en definitiva, toda la especie humana… Raro, porque, en realidad, la endogamia[19] es lo más lejano a una sana pluralidad genética que nos podamos imaginar. Tendré que citar a nuestro ministro Wolfgang Schäuble (muy conservador y muy anti-derecha[20]) quien asegura que cerrar la sociedad a las influencias externas nos llevaría a la degeneración[21].

Yo me pregunto por qué países como Estados Unidos, Canadá, Australia y últimamente Alemania son países triunfadores. Con tanta inmigracióin y tanta mezcla de “culturas” deberían ya estar muertos 😛 [22] Es más, con la mezcla de culturas, etnias, razas, o cómo quieran llamarlas que ha habido desde el comienzo de la existencia humana, ya deberíamos estar todos muertos. Pero ocurre exactamente lo contrario: somo más y -pese al pesimismo cultural que no comparto- somos incluso mejores[23].


[1] “Unter allen Umständen muss verhindert werden, dass sich Kulturen vermischen. Das würde sie erst überfremden, dann vernichten”, Vermischt euch! en taz.

[2] Sobre el etnopluralismo como racismo, ver mi artículo Un fantasma recorre Europa, el fantasma del etnopluralismo

[3] A ellos me referí en mi columna ¿En qué se parecen John Boehner y yo? al hablar de los grupos del grupos del nacional catolicismo espanol tradicionalista, etc.

[4] Gaudium et spes, número 33.

“No hablamos acaso de «familia humana» al referirnos al conjunto de los hombres que viven en el mundo?”, nos decía Juan Pablo II en su Carta a las familias, de 1994.

[5] Gaudium et spes, número 42.

[6] “…wenn man Christsein hauptsächlich als Ordnungsideologie, als einen Identitätsmarker versteht. Also wo das Rechtskonservative, das ja immer sehr ordnungsfixiert ist, das Christliche überwölbt”. Andreas Püttmann, entrevista en Domradio (Radio de la catedral de Colonia), “Irgendwann fällt einem das auf die Füße”.

[7] Invito a quienes lean alemán, a mi columna Das Opus Dei und die AfD (2), a leer lo que cuento sobre el blog Kirchenrecht.

[8] “Wir erleben zum ersten Mal in der Geschichte der Bundesrepublik, dass Konservative gemeinsame Sache mit Rechtsradikalen in einer Partei machen. Das ist auch das Beunruhigende”,  “Irgendwann fällt einem das auf die Füße”, en la radio de la Catedral de Colonia o Domradio..

[9] Wikipedia francesa.

[10] Was bedeutet Ethnopluralismus? en Netz gegen Nazis.

[11] “Die deutsche Politik hat eine Eigenverantwortung, das Überleben des eigenen Volkes, der eigenen Nation sicherzustellen”.

[12] Armin Pfahl-Traughber explica que esta creencia fue desarrollada, ya en los setenta, por el francés de Benoist. Ver. Zur Ideologie des “Ethnopluralismus”: Das Volk als Subjekt, en Netz gegen Nazi.

[13]  Ethnopluralismus, en el glosario de la Brandenburgische Landeszentrale für politische Bildung.

[14] Saludos de la senora von Storch. Me pregunto qué habría pasado si a la familia de su marido, no la hubiéramos recibido e integrado en Chile.

[15] Nota 25 de mi artículo anterior sobre el fantasma del etnopluralismo.

[16] Liane Bednarz, Christoph Giesa: Gefährliche Bürger: Die neue Rechte greift nach der Mitte. Editoial Hanser 2015. Páginas 71 y 72. Los autores explican que de Benoist denomina el etnopluralismo como un anti-racismo diferencializado o como un multiculturalismo moderado (sic).

[17] “Laut de Benoist würde der Universalismus und der Liberalismus zum „Ethnozid, das heißt zum Verschwinden der Ethnien als Ethnien führen”. Reconozco que esta es una cita secundaria, ya que no tengo libros de Benoist a la vista (los tiré a la basura a comienzos de este siglo, de lo que me arrepiento, pues hoy me servirían como objeto de estudio). Ver citas de Alain de Benoist en Indymedia

[18] George M. Fredrickson, en su obra “Rassismus” (Editorial Reclam 2004), hace ver esto. Página 19. Traduzco por “superar”, lo que más propiamente, se llamaría “tender puentes”.

[19] “Se denomina endogamia (del griego ἔνδον endon ‘dentro’, y γάμος gamos, ‘casamiento’) al matrimonio, unión o reproducción entre individuos de ascendencia común; es decir, de una misma familia, linaje o grupo (religioso, étnico, geográfico)”. Gracias a Wikipedia

[20] Penso en el artículo que Liane Bednarz acaba de publicar, titulado Das Konservative muss vor den Rechten geschützt werden (Lo que es cnservador debe ser protegido/separado de lo que es de derecha)

[21] Abschottung würde uns in Inzucht degenerieren lassen. Y otros muchos artículos sobre el tema Inzucht, Schäuble. Recomiendo leer sólo la prensa seria.

[22] Creo que estos etnopluralistas se mueren si saben que el embajador de mi país en Alemania se apellida O’Ryan Schütz. Mi profesora de derecho internacional, Panatt Kyling. O, sin ir más lejos, nuestra ex-miss Universo,. Bolocco Fonck.

[23] Muchas veces nos parece que las cosas andan mal; pero lo que ocurre, en realidad, es que hoy vemos las cosas malas que antes no veíamos: los genocidios, la opresión, la corrupción, la discriminación, la injusticia en general. Hoy la guerra -la agresión, el conflicto armado- no es un medio legítimo… Mientras más vemos, más se agudiza nuestra visión crítica. Es como la lupa de que hablaba Santa Teresa: mientras más avanzamos, más vemos nuestros defectos.